Durante el XIX Encuentro Anual de Minería (ENAEP 2024), que se realizó este martes 26 de noviembre en Quito, la viceministra de Minas, Rebeca Illescas, explicó que los apagones, los retrasos en la emisión de licencias, trabas en temas aduaneros, además del incumplimiento de Ecuacorriente S.A, concesionaria de la mina Mirador, de construir la hidroeléctrica Santa Cruz, entre los principales factores, provocarán que las exportaciones mineras caigan 20% en 2024 en comparación a los montos alcanzados en 2023.
Antes de los apagones, se esperaba un aumento de entre el 20 % y 30 % de las exportaciones mineras, gracias a los envíos de los proyectos a gran escala, Fruta del Norte y Mirador, pero también de la pequeña minería. Sin embargo, “vemos que estamos un poco retrasados en el cumplimiento”, reconoció la viceministra de Minas.
Las razones de la caída en exportaciones están en los apagones que limitan la operación de las mineras; pero también está el hecho, analizado por LA HORA, de que la concesionaria de la mina Mirador ha paralizado operaciones, y ahora está trabajando al 50%, debido a que no tiene la suficiente capacidad de autogeneración eléctrica aunque se había comprometido a tenerla desde que firmó el contrato con el Estado ecuatoriano en 2012.
No obstante, Illescas dijo que las exportaciones se recuperarán el próximo año. “No hay ningún problema porque los minerales están ahí”, afirmó.
Además, señaló que se está trabajando en consolidar la información minera que manejan varias instituciones, como el Banco Central del Ecuador (BCE), el Servicio de Rentas Internas (SRI), la agencia de control, entre otros, lo cual dará mayor claridad sobre la situación de la industria.
Si no tiene su propia generación eléctrica, Mirador no podrá hacer la segunda fase de su mega mina
La mina lleva aproximadamente 30 días limitada en su consumo energético desde que a mediados de octubre la ministra de Energía y Minas encargada, Inés Manzano, dispuso que se desconecte temporalmente del Sistema Nacional Interconectado (SNI). Durante este tiempo, Mirador ha tenido unos 20 días de operación con niveles mínimos, señaló la viceministra.
Illescas explicó que se mantienen conversaciones con la Ecuacorriente para que se concrete la autogeneración que necesita (entre 38 y 42 Megavatios por hora). Según la Viceministra, esa autogeneración no necesariamente se podría cubrir con la construcción de una central hidroeléctrica Santa Cruz, sino que puede ser una combinación de varias fuentes de energía como gas o eólica.
La falta de autogeneración de energía frena la autorización del Gobierno para que el proyecto de cobre se expanda y avance a su segunda etapa. “La primera disposición es: ustedes solucionen el tema energético y comencemos de ampliar las operaciones. No sería posible que puedan ampliar operaciones si no tienen resuelto el tema energético, porque no van a tener electricidad para poder operar”, respondió la viceministra al ser consultada sobre el tema.
Agregó que el Gobierno no puede imponer a la empresa privada la solución que deben implementar, “pero sí le puedo decir no le voy a dar electricidad; por lo tanto, tiene que tener una solución”.
Sobre el proyecto Fruta del Norte, a cargo de la empresa canadiense Lundin Gold, Illescas contó que “está operando casi normal”, porque han instalado 10 MW por su cuenta y han traído más generadores para sostener sus operaciones.
“Ellos consumen alrededor de 14 MW y tienen 10 instalados, entonces no les afecta como les afecta al resto de proyectos”, describió e indicó que por esta razón Fruta del Norte ha tenido una afectación mínima en sus operaciones por los apagones. (JS)
Diario La Hora