Nueva York derogó este viernes una ley de 1907 que penalizaba el engaño conyugal, un delito menor que suponía hasta tres meses de prisión para quien fuera encontrado culpable del delito de adulterio. La norma era considerada anticuada desde hacía mucho tiempo, así como difícil de implementar.
La gobernadora Kathy Hochul promulgó un proyecto de ley que deroga el centenario estatuto. «Aunque he tenido la suerte de compartir una vida matrimonial amorosa con mi esposo durante 40 años —lo que lo hace un tanto irónico para mí promulgar un proyecto de ley que despenaliza el adulterio— sé que la gente a menudo tiene relaciones complejas», señaló.
«Claramente, estos asuntos deberían ser manejados de forma personal y no por nuestro sistema de justicia penal. Eliminemos este estatuto tonto y obsoleto de nuestros códigos de una vez por todas», agregó Hochul.
La ley contra el adulterio se utilizó por primera vez apenas unas semanas después de entrar en vigor para procesar a un hombre casado y a su amante, de 25 años, en el marco de los procedimientos preliminares de la esposa para conseguir el divorcio, documentó un artículo de The New York Times el 18 de septiembre de 1907. En aquel entonces, la única manera de divorciarse legalmente era demostrando que el cónyuge había cometido adulterio.
La anticuada legislación fue empleada por última vez en 2010 contra una mujer que se había entregado a placeres carnales en un parque. Desde los años 70, una decena de residentes en Nueva York fueron procesados por infidelidad, y cinco casos terminaron con condena. RT
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