En el mundo de la exportación de atún hay dos grandes competidores: Tailandia y Ecuador.

Según la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros (CEIPA), nuestro país es el segundo mayor exportador de lomos precocinados y conservas de atún a escala mundial; en primer puesto están los tailandeses.

Es por eso que cualquier debilidad para Tailandia es una oportunidad para Ecuador. El mes pasado Estados Unidos incluyó a productos derivados de la pesca de Tailandia en su lista negra por tener “riesgos potenciales de trabajo infantil y trabajo forzoso”.

Esto ha llamado la atención del sector pesquero ecuatoriano, en especial el atunero, que ve una oportunidad para ganar mercado en ese país.

Según publicación del pasado, 5 de noviembre, de Atuna, uno de los principales sitios web sobre noticias de la industria del atún, el Departamento de Trabajo de Estados Unidos declaró que se ha identificado que los productos de comida para mascotas, harina de pescado y aceite de pescado tailandeses elaborados a partir de atún y otros mariscos presentan “riesgos potenciales de trabajo infantil y trabajo forzoso”.

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Lucía Fernández, empresaria pesquera, comentó que esta es una oportunidad para el sector industrial y semiindustrial de Ecuador, ya que entrar con productos pesqueros que han sido calificados como uno de los mejores del mundo, abriría muchas posibilidades de inversiones en el país.

“Actualmente, los productos pesqueros ecuatorianos en pouch son los únicos que pueden entrar a Estados Unidos sin aranceles (impuestos); lo que estamos peleando es que los productos en lata, tanto en aceite, como en agua, también ingresen sin aranceles. Además, el producto de Ecuador es de mucho mejor calidad que el de Tailandia. Muestra de eso es que en Europa, Ecuador sigue teniendo un mercado a pesar de que Tailandia vende más barato”, explicó.

El atún ecuatoriano en agua ingresa a Estados Unidos con el 12 % de arancel y el que se vende en aceite con 35 %. Ecuador compite en este mercado con Tailandia, China y España.

Resaltó además las regulaciones que tienen las fábricas de Ecuador en todo el proceso de la pesca, desde la captura hasta el procesamiento, y que cumplen con las normativas europeas, las más rigurosas a nivel mundial en el tema ambiental, inocuidad, trazabilidad, responsabilidad social.

“Esto es una oportunidad que se puede aprovechar para suplir el mercado de Estados Unidos. Al momento que ingrese no hay quién pare nuestro producto porque es de altísima calidad”, expresó.

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Ecuador exporta un promedio de 250.000 toneladas de atún cada año. De esta cifra el 51% va a Europa, el 13 % a Estados Unidos y el resto a países de Latinoamérica. El 70 % de las industrias atuneras se encuentra en Manta; hay otra parte en Guayaquil y Posorja.

Mónica Maldonado, presidenta de la Cámara Ecuatoriana de Industriales y Procesadores Atuneros (CEIPA), dijo que sucesos como estos son siempre una oportunidad, por eso siguen impulsando el proyecto de ley de Innovación y Desarrollo en Ecuador (IDEA). De aprobarse se lograría que el atún ingrese con cero arancel a Estados Unidos.

La propuesta fue presentada ante la Cámara de Representantes de Estados Unidos el 14 de noviembre de 2023.

Contó que al margen de las sanciones que imponga el gobierno estadounidense a productos importados de otros países, la industria atunera ecuatoriana se ha caracterizado por cumplir todas las regulaciones nacionales e internacionales en referencia a la pesca de atún.

“La industria representada por CEIPA ha liderado la trazabilidad en la cadena de suministro de atún, cumpliendo con las normas del Parlamento Europeo. Además, Ecuador cuenta con una Ley de Pesca y su respectivo reglamento, que fortalecen los estándares de calidad y seguridad”, expresó.

Dijo que hace dos años se implementó el Programa de Mejora de Calidad de Vida, el cual ha promovido la sostenibilidad social para los trabajadores de las fábricas a través de un sistema de semaforización donde identifican sus necesidades urgentes y las prioritarias.

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Mientras tanto, el gobierno tailandés designó un grupo de trabajo para examinar los detalles y garantizar que los productos incluidos en la lista negra se eliminen pronto de la misma. La Asociación Tailandesa de Comercio de Alimentos para Mascotas (TPFA) y la Asociación de la Industria del Atún de Tailandia también participan en el grupo de trabajo, detalló Atuna. (I)

Fuente: El Universo