Esta transferencia se dio mediante la firma de la escritura de donación del inmueble, que asegura la continuidad de un centro de enseñanza fundamental para niños y jóvenes con discapacidad, en la provincia de Tungurahua.
Desde su fundación en 1974, la Unidad Educativa Especializada «Ambato» ha sido un referente en la educación y rehabilitación para personas con multidiscapacidad, autismo y deficiencia intelectual. Con una matrícula actual de 190 estudiantes, el centro ofrece un enfoque integral, abarcando desde la educación inicial hasta el bachillerato, e incluyendo servicios de terapia física, ocupacional, lenguaje, hidroterapia e hipoterapia.
La coordinadora zonal del MIES, Doménica Peña, destacó la importancia de esta donación para el desarrollo de los estudiantes y la comunidad. “Esta donación no solo representa la entrega de un espacio físico; significa nuestro compromiso para con una educación inclusiva y de calidad, construida sobre un legado de amor y dedicación a los derechos de las personas con discapacidad”, manifestó.
Por su parte, Daniel espín, coordinador zonal 3 del MINEDUC, mencionó que la Unidad Educativa Especializada ‘Ambato’ ha sido y seguirá siendo un faro de esperanza para las familias de Tungurahua y un modelo de inclusión. “Hoy, gracias a la articulación con el MIES, damos un paso para garantizar su continuidad y crecimiento”, agregó.
La firma de la escritura se realizó con la presencia de autoridades de ambas instituciones, en donde se detalla la donación de 5.887 m2 de área de terrero y 1.711 m2 de construcción para el funcionamiento de la unidad educativa.
Con esta donación, el MIES y el Ministerio de Educación ratifican su compromiso con la educación inclusiva y con el fortalecimiento de espacios que permitan promover la inclusión social y educativa para este sector de la población.
Comunicación Social – Coordinación Zonal 3