La Juventus de Turín tiene trabajo por delante para dar con la tecla idónea que le permita potenciar su capacidad competitiva tanto en Italia como en Europa. De todos modos, al menos en lo que guarda conexión con el aspecto defensivo, está logrando una importante estabilidad que puede conducirle hacia la senda del éxito con el transcurso de la temporada. Y ya se está moviendo en el mercado para futuras ventanas de transferencias.
Todo ello, por supuesto, con la finalidad de apuntalar las prestaciones de la plantilla dirigida por un Thiago Motta que aceptó encantado el desafío de los bianconeri. Un técnico que implementó a las mil maravillas su filosofía futbolística a los mandos del Bolonia, por lo que confía en hacer lo propio al frente de este transatlántico del Scudetto. Un torneo que fue a parar a las vitrinas del Inter de Milán durante el curso anterior.
Por lo que respecta a la jornada de este primer sábado de noviembre, la Vecchia Signora estaba lista para una nueva prueba de altura en el calendario de la Serie A. A saber, las tropas de Motta habían activado la maquinaria con la intención de imponer su ley a costa de Udinese. Pasando al partido, la mala fortuna se cebaría con un Maduka Okoye que se introduciría el cuero en su propia puerta. Además, el prometedor Nicolò Savona sellaría la victoria de la Juve en el Bluenergy Stadium.
Fuente: Fichajes.com
MM