Ocho cadáveres provenientes del hospital Monte Sinaí, de Guayaquil, fueron trasladados en un camión hasta el cementerio general de Quevedo.
“Fueron sepultados de manera ilegal en una fosa común pese a que nadie nos ha notificado e informado del hecho, desconocemos cuáles fueron las intenciones de haberlos sepultado en Quevedo cuando, según la documentación, el lugar de destino era el cementerio la Paz”, indicó Hugo Fonseca, director administrativo del cementerio municipal de Quevedo.
El fin se semana se viralizaron fotos y videos por parte de habitantes del sector Galo Plaza, en las que se observa a hombres descendiendo los cuerpos que estaban envueltos en plásticos de color negro y cubiertos con cal.
Quienes manipularon los restos no usaban mascarillas, guantes ni trajes de bioseguridad.
El hecho alarmó a los quevedeños, que adujeron que se trataba de personas fallecidas durante la pandemia y cuyos cuerpos permanecían anteriormente en contenedores refrigerados en Guayaquil.
“Nos llamó la atención la forma en que trajeron y manipularon los cuerpos, dicen que corresponden a cadáveres en descomposición, en esta ciudad no hay orden”, comentaron ciudadanos.
En tanto que por parte de la Gobernación dijeron desconocer del hecho al igual que una fuente del Servicio de Ciencias Forenses.
El administrador del cementerio de Quevedo señaló que los cuerpos fueron recibidos por un obrero que hace las funciones de albañil en el camposanto.
Hugo Fonseca aseguró que pese a que el protocolo determina que cada cuerpo debía ser sepultado en su respectiva fosa, los ocho cadáveres fueron enterrados en una sola fosa común.
“No existió cadena, se trata de cuerpos inidentificados, el protocolo indica que debe ser sepultado cada uno en una fosa ante la posibilidad que se dé una exhumación, desconozco si hubo una disposición de una autoridad nacional (…) estamos en la Fiscalía para colocar la denuncia y las autoridades inicien las investigación correspondiente”, precisó el funcionario.
Se informó que en Quevedo y Buena Fe desde junio a octubre han sido sepultados alrededor de 70 cadáveres provenientes de Guayaquil, estos bajo autorización de la Fiscalía o el servicio de Ciencias Forenses.
Cada uno, contando con su protocolo de autopsia, sin embargo, en esta ocasión el arribo de los ocho cuerpos ha generado dudas del procedimiento realizado. (I)
Fuente: El Universo