Con empate técnico en las encuestas sobre intención de voto, Donald Trump y Kamala Harris invierten cientos de millones de dólares en un último empujón para convencer a los votantes indecisos e inclinar la balanza a su favor, cuando faltan dos semanas para una de las elecciones más reñidas de la historia contemporánea de Estados Unidos.
Alrededor de 18 millones de estadounidenses ya han votado por correo o en persona, lo que representa más del 10% del total en 2020. Y en estos comicios el nivel de participación podría ser el factor decisivo para conseguir las llaves de la Casa Blanca, detalla AFP.
Algunas encuestas dan una ligera ventaja al republicano, pero dentro del margen de error.
En los siete estados clave para las elecciones presidenciales (Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Carolina del Norte, Arizona, Nevada y Georgia) los últimos sondeos publicados el lunes por el New York Times continúan dando a los rivales codo con codo.
Lo mismo en una encuesta realizada por el Washington Post: el 47% tiene la intención de votar por Harris y otro tanto por Trump.
Según el último pronóstico del portal FiveThiryEight en base al promedio de encuestas publicadas a nivel nacional y en los estados clave, Trump logra una ligera ventaja sobre Harris y tiene un 52 % de posibilidades de ganar las elecciones del 5 de noviembre.
A pesar de que la demócrata lidera la intención de voto a nivel nacional, el republicano resulta más favorecido por el Colegio Electoral, el sistema mediante el cual los estados otorgan un determinado número de votos electorales al candidato ganador.
Dos semanas atrás, el pronóstico del mismo portal daba un 58 % de opciones a Harris de derrotar a Trump.
La diferencia entre Harris y Trump es de menos de dos puntos porcentuales en los siete estados decisivos (Arizona, Georgia, Míchigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin) de manera que un pequeño error estadístico podría alterar el resultado. (I)