“Si vemos que no hay crecimiento económico, que no se genera empleo, que más del 60% de la población tiene un empleo informal, eso significa que las deudas que están en el sistema financiero van a seguir en segundo plano. Yo voy a destinar lo poco que puedo conseguir de ingresos para comprar los alimentos, pagar la educación de los niños”, ha dicho la economista, exgerente del Banco Central y Sub Decana de la Facultad de Economía de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador.
Así, se coge un crédito para pagar otro y la rueda del endeudamiento sigue creciendo.
Con una economía que viene en caída desde la segunda mitad de 2023, y que desde septiembre de 2024 está sufriendo las consecuencias de los apagones de al menos 10 horas diarias, los problemas de pago se pueden profundizar.
A todos esos factores se suma la inseguridad, pero sobre todo las extorsiones que afectan a pequeños negocios y emprendimientos que, en muchos casos, deben destinar el dinero que antes iba a pagar deudas a pagar a criminales para evitar mayores problemas en sus negocios.
Como ya ha analizado LA HORA, la cartera de crédito vencida ha experimentado un incremento del 183% en los últimos siete años.
En el caso del microcrédito, se ha dejado de entregar más de $500 millones en créditos; y todo hace prever que, en medio de mayores costos para las instituciones financieras (tanto por impuestos como otros factores), muchos ecuatorianos acostumbrados a tomar una deuda para tapar otra se verán en problemas para seguir aplicando esa estrategia.
De acuerdo con Valeria Llerena, directora ejecutiva de la RFD, el sector financiero se ha visto obligado a ajustar su funcionamiento y restringir su cartera de crédito.
Por lo tanto, solo una parte de la población podrá acceder a financiamiento, y tanto las empresas como las familias deberán subsistir con los recursos y condiciones disponibles, lo que tendrá implicaciones en el desarrollo y la producción del país.
Cinco claves para identificar que tiene un problema de endeudamiento
1.- Dificultad para pagar las deudas a tiempo: Uno de los primeros signos de un problema de endeudamiento es la incapacidad de cumplir con los pagos de las deudas en la fecha acordada, ya sea de préstamos, tarjetas de crédito o servicios. Esto incluye tener que pagar solo el monto mínimo de las tarjetas de crédito o pedir extensiones para abonar.
Consecuencia: Los intereses y penalizaciones por pagos atrasados aumentan el saldo total adeudado, lo que agrava la situación financiera y genera una espiral de deudas difícil de controlar.
2.-Uso constante de crédito para gastos básicos: Usar tarjetas de crédito o pedir préstamos constantemente para cubrir gastos corrientes, como la compra de alimentos, el pago de servicios públicos o el alquiler, es una clara señal de alerta. Esto indica que no se cuenta con ingresos suficientes para cubrir las necesidades básicas.
Este comportamiento puede llevar al aumento del endeudamiento a medida que se acumulan intereses sobre estos gastos, lo que eventualmente reduce la capacidad de ahorro y de mantener un colchón financiero.
3.-Endeudamiento por encima del nivel de ingresos: Si el nivel total de deuda supera los ingresos disponibles, o si una parte considerable del ingreso mensual se destina al pago de deudas (más del 30-40% de los ingresos), se considera un signo de endeudamiento problemático.
4.-Dependencia de nuevas deudas para pagar deudas existentes: Tomar nuevos préstamos o usar nuevas tarjetas de crédito para pagar deudas anteriores es una clara señal de advertencia. Esto incluye recurrir a créditos rápidos o consolidaciones de deuda de manera recurrente para «salir del paso».
Este comportamiento es insostenible a largo plazo y genera una «bola de nieve» de deuda, ya que cada vez se necesita más crédito para hacer frente a los pagos, lo que aumenta el riesgo de incumplimiento y bancarrota.
5.- Estrés y Ansiedad Constante por las Finanzas: Las preocupaciones constantes sobre el dinero, la ansiedad por las deudas o la falta de sueño debido al estrés financiero son indicativos de un problema grave de endeudamiento. Sentir temor a recibir llamadas de los acreedores o tener que evitar revisar los estados de cuenta son señales emocionales importantes.
El estrés financiero afecta no solo la salud mental, sino también las relaciones personales y el rendimiento laboral. Esta situación puede llevar a una toma de decisiones financieras impulsiva o mal informada, como vender activos a precios bajos o recurrir a préstamos abusivos.
¿Qué hacer si le encuentra la crisis con entre 8 y 13 créditos simultáneo?
-Haz un inventario detallado: Toma nota de todas tus deudas, identificando el monto, tasa de interés, pagos mínimos y fechas de vencimiento de cada una. Esto incluye préstamos bancarios, tarjetas de crédito, deudas con proveedores o cualquier otra obligación.
-Organiza la información: Usa una hoja de cálculo o un sistema de gestión para visualizar claramente qué pagos debes hacer y cuándo, de modo que puedas priorizar y evitar cargos adicionales por mora.
-Deudas de alto interés: Prioriza el pago de las deudas con las tasas de interés más altas (generalmente tarjetas de crédito o préstamos personales). Estas son las que más rápido se acumulan y pueden llevarte a una espiral de deuda si no se abordan.
-Deudas críticas para mantener el negocio y la vida diaria: En segundo lugar, prioriza las deudas esenciales, como alquiler, facturas de servicios públicos o proveedores clave para mantener operativa tu empresa.
-Deudas con garantía o colaterales: Si alguna deuda está respaldada por un activo (como tu casa o automóvil), asegúrate de no incumplir con esos pagos para evitar el riesgo de perder el bien.
-Comunicación directa: No esperes a estar en incumplimiento. Contacta a tus acreedores para explicar la situación y pedir opciones. Las crisis económicas suelen afectar a muchas personas, por lo que las instituciones financieras pueden ofrecer flexibilidades temporales.
-Solicitar reducción de pagos o extensión de plazos: Pide una reestructuración de tu deuda, lo cual podría incluir pagos mensuales más bajos o una extensión del plazo de pago para reducir la presión mensual.
-Congelamiento de intereses: En algunos casos, podrías solicitar que se congelen temporalmente los intereses acumulados. Si no lo solicitas, esta opción puede no estar sobre la mesa.
-Simplifica el pago: Si es posible, busca consolidar tus deudas en un solo préstamo con una tasa de interés más baja. Esto te ayudará a reducir la cantidad de pagos a los que tienes que estar pendiente y, con suerte, disminuirá la carga de intereses.
-Préstamos con mejores condiciones: Si todavía tienes acceso a crédito, evalúa la posibilidad de un préstamo personal a menor tasa para pagar deudas de alta tasa de interés.
-Recortes inmediatos: Revisa minuciosamente tanto tus gastos personales como los de tu negocio para eliminar aquellos que no sean esenciales. Recortar temporalmente en áreas como marketing, suscripciones o lujos personales puede generar liquidez.
-Cambios operativos: Busca maneras de hacer que tu negocio opere más eficientemente con menos costos, como renegociar contratos de proveedores, reducir el inventario o incluso reducir la jornada laboral.
- Aumentar los ingresos rápidamente
Venta de activos no esenciales: Evalúa si puedes vender bienes personales o activos del negocio que no son críticos para tu operación diaria. Esto puede generar liquidez inmediata para cubrir los pagos más urgentes.
Diversificación de ingresos: Explora nuevos canales de ingreso que sean adaptables a la crisis, como productos o servicios digitales, trabajo freelance, o la búsqueda de clientes en mercados menos afectados.
-Método Bola de Nieve: Prioriza pagar la deuda más pequeña primero. Una vez eliminada, usa el monto liberado para pagar la siguiente deuda más pequeña. Este método genera una sensación de avance psicológico y de control.
-Método Avalancha: Prioriza las deudas con la tasa de interés más alta primero. Aunque puede que las deudas más grandes tarden más en pagarse, a largo plazo estarás ahorrando dinero en intereses.
-No gastes más de lo que generas: Calcula cuántos ingresos realmente generas en el contexto actual y ajusta tus gastos estrictamente a esa cantidad. Si tienes dificultades para cubrir los pagos mínimos, considera pagos parciales pero regulares para evitar un incumplimiento total.
-Racionaliza inventarios y compras: Si tienes un negocio, evita hacer compras de inventario excesivas que afecten tu flujo de caja. Ajusta tu oferta a la demanda real de este momento de crisis.
-No uses nuevas líneas de crédito: A menos que sea para refinanciar a una tasa más baja, evita contraer más deudas. Las nuevas líneas de crédito podrían empeorar tu situación.
-Mantén tu historial crediticio: Trata de mantenerte al día con los pagos mínimos, incluso si se trata de montos pequeños, para evitar dañar aún más tu historial crediticio. Un mal historial crediticio podría limitar tus opciones de financiamiento en el futuro.
-Consultor financiero: Si tu situación se vuelve demasiado difícil de manejar por ti mismo, busca el apoyo de un asesor financiero especializado en deudas. Ellos pueden ayudarte a trazar un plan personalizado, negociar con tus acreedores o incluso considerar una reestructuración más profunda.
-Explorar opciones legales: En casos extremos, si no ves una salida viable, es recomendable consultar a un abogado especializado en insolvencia. Dependiendo de las leyes locales, podrías acceder a soluciones legales como la quiebra o una restructuración ordenada de tus deudas.
Diario La Hora