Matías Novoa, quien se mudó a España hace algunos meses por su primogénito, decidió regresar hace varios días a la Ciudad de México para visitar a su hijo mayor Axel, de 13 años. A pesar de la felicidad que siente junto a su esposa Michelle Renaud, tras la llegada de su bebé Milo, el actor no quiso perder la oportunidad de reencontrarse con su primer gran amor.
“Por eso estoy aquí también, vengo a verlo, porque es mi primogénito. Sí, por supuesto, tenía qué ser así, Axel tenía qué conocerlo y me lo voy a llevar de nuevo, un par de meses, para que pase las vacaciones con nosotros”, comenzó diciendo el chileno sobre lo emocionado que se encuentra por seguir coleccionando valiosos recuerdos con Axel.
“Eso lo están viendo los abogados, yo solo puedo decir que jamás desampararía a mi hijo, él es lo más importante para mí, él y Milo, mi familia, ahora. Creo que yo, por los valores que tengo, jamás dejaría a Axel desamparado, jamás lo he dejado”, le respondió a las insistentes preguntas de los reporteros.
Sobre su experiencia con la llegada de Milo dijo que es: “Diferente en todos los sentidos, después de 13 años ser papá de nuevo, fue algo maravilloso. Como lo tuvimos también, lo tuvimos en casa, fue una experiencia divina, de mucha paz, fue como un ritual, fue muy bonito”.
El chileno aprovechó para añadir algunos detalles de lo que fue la llegada del integrante más pequeño de la familia: “Lo recibimos ahí, literal, al lado de la cocina, pasó por toda la casa, buscando una postura que fuera más cómoda. Para ella, fue maravilloso, las mujeres tienen un poder superior a los hombres, no sé cómo aguantan, pero fue hermoso, fue una experiencia maravillosa”.
Fuente: El Diario NY
ra