Dos de las cuatro ubicaciones de Worldcoin permanecen clausuradas en Guayaquil. Al cierre de la oficina en el centro de la ciudad por parte del Municipio, se le sumó otra de La Garzota (al norte), en medio de dudas sobre la captación de datos sensibles de los usuarios.
Mientras, las oficinas de la empresa en el barrio Centenario (sur) y en Samanes (norte) sufren una drástica disminución de la concurrencia de usuarios, en medio de cambios en el sistema de retribución de la empresa y de una caída de la cotización de su criptomoneda.
Worldcoin compensa con criptomonedas a sus usuarios por verificarse en su sistema de escaneo del iris en sus oficinas en Guayaquil y Quito. Y ello ha encendido las alertas de organismos estatales que han pedido a los ciudadanos evitar acceder al escaneo del iris.
El Municipio de Guayaquil clausuró el pasado 2 de agosto la oficina del centro, ubicada en la calle Panamá e Imbabura por incumplimiento de requisitos en la tasa de habilitación y control, luego del congestionamiento de público pues cientos de usuarios acudían a diario a esa zona turística.
La Municipalidad también clausuró la oficina de La Garzota por falta de permisos municipales.
Sello municipal de clausura en un local de Worldcoin en La Garzota, al norte de Guayaquil.PRIMICIAS
Locales con baja demanda
Mientras que en la ubicación de Samanes la concurrencia cayó la última semana a menos de la mitad y en la oficina del barrio Centenario, que comenzó atendiendo a más de 200 personas al día, la presencia de usuarios es casi nula.
Uno de los cambistas de criptomoneda (trader) por dinero en efectivo dijo que la oficina de Samanes pasó de atender a más de 100 personas a menos de 30.
Y eso tiene que ver, según dijo, con una disminución del número de criptomonedas con la que se les está retribuyendo inicialmente a los usuarios. Y es que pasaron de recibir 10 criptomonedas como primera compensación a solo 6 (de 65 que desbloquean en un año).
Y otro problema es la caída de cotización que sufrió la moneda hace una semana. Este lunes 12 de agosto se cotizaba en USD 1,61.
“Los usuarios pasaron de recibir 20 o 30 dólares al cambio inicialmente, a menos de 10 con lo que se hace menos atractivo”, explicó un cambista informal en el local de Samanes, que exhibe su tasa de habilitación municipal. “La empresa le está bajando el perfil al negocio hasta tener todo en regla”.
Mientras que uno de los pocos usuarios que acudió a una cita este 12 de agosto del 2024, indicó que cambiará sus criptomonedas más adelante, a la espera de una mejor cotización.
Fuente: Primicias