El presidente venezolano, Nicolás Maduro, encabezó este martes una reunión extraordinaria de los consejos de Estado y de Defensa de la Nación, frente a lo que calificó como “intentos de desestabilización” por parte de factores de la extrema derecha tras los comicios del pasado domingo, en los que obtuvo un tercer mandato.
En el encuentro participaron altos representantes de los poderes públicos, incluyendo la vicepresidenta Delcy Rodríguez, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López y el fiscal general, Tarek William Saab, así como el alto mando militar-policial.
En su decir, los hechos de violencia que se han registrado durante las últimas horas obedecen a un plan tramado desde hace meses, del que participan, entre otros, el Gobierno de EE.UU. y “el narcotráfico colombiano”.
“Detrás de este plan, lo he denunciado, está el imperio de los EE.UU., el narcotráfico colombiano, Elon Musk y la derecha extremista fascista del mundo. Se vinieron contra Venezuela porque creyeron que la podían tomar en base a las campañas de redes”, aseveró.
Sostuvo asimismo que “todas las redes sociales están complotadas contra Venezuela”, en interés de mostrar una realidad paralela, como ocurriera durante el golpe de Estado de abril de 2002, cuando los medios de comunicación construyeron un relato falaz sobre lo sucedido.
“Lo que esta gente –la oposición extremista– ha hecho, devela completamente el rostro terrible, decrépito del fascismo. Esta gente pretende gobernar el país desde la violencia, la criminalidad, la destrucción, la persecución y la muerte”, afirmó.
“Batalla definitiva”
Tras indicar que, pese a sus advertencias durante el desarrollo de la campaña electoral la mayoría de las personas no creyó que pudiera desatarse una agenda desestabilizadora basada en la violencia y los hechos mostraron lo opuesto, apuntó que la vida en las ciudades empieza a normalizarse.
“La batalla del 28 de julio es la batalla definitiva contra el fascismo, contra el odio, contra la intolerancia y contra los que quieren imponer una guerra civil en Venezuela, un golpe de Estado, la división, el enfrentamiento entre los venezolanos”, aseguró.
La “vorágine delincuencial” de la víspera, dijo, incluyó la quema de sedes del Consejo Nacional Electoral (CNE) e instituciones gubernamentales, así como ataques contra ciudadanos comunes.
Maduro declaró que estos actos fueron perpetrados por “órdenes” directas de la dirigencia de la extrema derecha, en particular, de María Corina Machado y el excandidato Edmundo González Urrutia.
Fuente: RT