Hace tres años y medio, el irlandés Niall Harbison dejó el consumo de sustancias (era alcohólico y adicto al Valium) después de casi morir por una sobredosis. Era 31 de diciembre y decidió cambiar su vida, no solo volviéndose sobrio, sino encontrando una causa que amara tanto como para mantenerse en ese estado. Se dedicó a rescatar perros callejeros.
Harbison vive en Tailandia y recoge animales que están en condiciones críticas, gestiona la atención veterinaria y les encuentra un hogar, a veces al otro lado del mundo. Sin olvidar a los 80 perros abandonados a los que visita y alimenta a diario. Las historias de recuperación canina están en sus cuentas de Twitter e Instagram. “Levantarse es posible, para los perros y para los humanos. Recuerda eso”.
Diario El Universo