El tiempo avanza y con él cambia la sociedad, la manera en la que nos comportamos y la forma en la que nos expresamos. La música es el lenguaje más universal que existe, así que es obvio que esta también se transforme en múltiples aspectos.
A continuación, nos centraremos más concretamente en el reggaetón, uno de los géneros cuyo consumo ha aumentado considerablemente alrededor del mundo en la última década. Este estilo ha trascendido fronteras más que nunca, puesto que ya no solo los países de habla hispana escuchan canciones de Bad Bunny, Karol G o Rauw Alejandro, sino que ahora el público es mundial.
El reaggaetón es un estilo musical que ya domina las listas de éxitos de cualquier país y en parte es gracias a la transformación que está experimentando últimamente. Tradicionalmente conocido por sus letras machistas y su representación estereotipada de género, el reggaetón está siendo desafiado por una nueva ola de artistas que están cambiando la narrativa que había establecida hasta el momento.
Por una parte, tenemos a las mujeres, y por otra a los artistas que pertenecen al colectivo LGBT. Hoy nos centraremos en el segundo grupo de personas. Estos artistas que se pueden identificar como lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, están utilizando el reggaetón como plataforma para expresar su identidad y desafiar las reglas impuestas tradicionalmente en este estilo.
De este modo, poco a poco aparecen más cantantes que gracias a su música acaban creando un espacio seguro para la comunidad LGBT en un género que ha sido históricamente dominado por la masculinidad heteronormativa. Artistas como Villano Antillano, Young Miko o La Cruz se posicionan como los referentes más grandes. Por un lado, utilizan su música para abordar temas como la homofobia, las críticas o el amor propio, pero también tienen un amplio repertorio que sirve para hablar de sus sentimientos e historias románticas de la forma más natural posible.
La creciente popularidad del reggaetón LGBT está cambiando la forma en la que el público percibe el género, al menos poco a poco. Es cierto que sigue estando dominado por un amplio catálogo de artistas y canciones en las que el machismo y la homofobia están muy presentes, por lo que la discriminación y los prejuicios, tristemente, siguen a la orden del día. Pese a ello, gracias a la música y la naturalidad con la que cantantes como Maria Becerra, Ptazeta o Lali han abordado historias de amor lésbico en sus canciones, demuestran que el reaggaetón puede llegar a ser un género inclusivo que celebre la diversidad, aunque está claro que queda mucho camino por recorrer, especialmente hablando de artistas masculinos.
