HISTÓRICO: Richard Carapaz ganó la etapa 17 del Tour de Francia

En la primera etapa de montaña en la que era posible huir del canibalismo de Pogacar y Vingegaard por el triunfo, Richard Carapaz fue el mejor. El corredor ecuatoriano se coronó en el primer final de la historia en Superdévoluy y ya sabe lo que es ganar una etapa en el Tour de Francia.

El ecuatoriano, que acumulaba tres triunfos en LaVuelta y tres en el Giro, fue el más duro en una etapa en la que se corrió salvaje y que se definió en un mano a mano con Simon Yates que el ciclista de EF despachó con un ataque poderoso a dos kilómetros de coronar Col du Noyer, único primera del día.

Pogacar no disputó la etapa, pero metió el miedo en el cuerpo a su gran rival. El esloveno vio que Vingegaard volvía a quedarse aislado y a tres de coronar Noyer soltó a su némesis que mostró debilidad de nuevo. Visma frenó a Benoot que iba por delante y junto con la colaboración de Remco sofocaron el incendio y mantuvieron a su líder con esperanzas en la general. El belga saltó y le terminó metiendo 12 segundos con la crono más cerca.

A 18 de meta Simon Yates saltó del inmenso grupo perseguidor. Pletórico el británico, que apunta a ser corredor del Visma el próximo curso, alcanzó a los cuatro de la fuga primigenia que rodaban delante, les quitó las pegatinas y se lanzó con todo. Tras el salió, poderoso, Carapaz que se llevó a rueda al ganador de la Flecha, Stephen Williams. Por detrás, a 24 segundos, 30 ciclistas buscando su primer sorbo de gloria en este Tour.

A 2 de coronar Col du Noyer, Carapaz movió ficha. Intentó soltar de rueda a Yates con un latigazo furioso del ecuatoriano. Richard fue la gran apuesta de EF hace dos años y con un amarillo y un triunfo de etapa devuelve bastante de la confianza que Jonathan Vaughters puso en él cuando apostó más fuerte que nadie en su salida de Ineos

Visma echó monedas desde el inicio. Entraba viento de costado y jugaron a los abanicos intentando aislar a Pogacar.Todo le pilló a Adam Yates y el líder solo con Politt como ocurrió en el sterrato. Las radios comenzaban a echar fuego. «Necesitamos más presencia delante, Visma intenta saltar», decían en el coche de Pogacar. «UAE no está intentando controlar, UAE no está intentando controlar», insistían desde el coche de Visma. Querían la etapa y Van Aert iba a ser su baza.

El descontrol se apoderó del grupo que no cedía ante ninguna fuga y se veía cortado sistemáticamente a 49km/h de media. Cuando saltaron Magnus Cort (Uno-X), Romain Grégoire (Groupama-FDJ), Bob Jungels (Red Bull-Bora-Hansgrohe) y Tiesj Benoot (Visma-Lease a Bike) la paz llegó al grupo de favoritos. Tras la verbena con fuegos artíficiales de inicio, reserva de fuerzas para lo que queda por delante en estos Alpes finales del Tour.

Vía diario marca

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