Para este 3 de julio estaba previsto ingresar al dormitorio donde se halló el cuerpo de la subteniente Aidita Ati, el pasado 30 de junio. También se tomaron pruebas a dos de los oficiales involucrados.
Dos de los cuatro oficiales del Ejército, que estuvieron en el dormitorio la noche que murió la subteniente Aidita Ati en el Fuerte Napo, han entregado muestras biológicas para ser comparadas con el líquido encontrado en el cuerpo de la militar.
Ati Gavilánez, de 25 años y quien era parte de la brigada Napo, fue hallada sin vida el 30 de junio, recostada sobre la cama en que dormía.
Si bien, el Ejército informó inicialmente que se trataba de una muerte por asfixia, y luego de que ella había ingerido alcohol, al momento la Fiscalía investiga el hecho como un presunto femicidio.
Precisamente, este 3 de julio se cumplieron dos importantes diligencias como parte del caso, explicó la abogada de la familia de Ati, Paola Montoya.
“Estamos claros que fue un femicidio (…) esperamos que el espíritu de cuerpo no brille en este causa, porque la sociedad está cansada de esto”, dijo Montoya, este miércoles en entrevista con Ecuavisa.
¿Qué diligencias se han realizado hasta ahora y cómo avanza el caso?
- Para este 3 julio se iniciaba la reconstrucción de los hechos, que provocaron la muerte de la subteniente Ati en el fuerte militar Napo. Esto incluía ingresar a la habitación donde residía, mientras estaba en el Ejército.
- Según relató Montoya, se tenía prevista la presencia de los cuatros oficiales, sobre quienes pesan medidas cautelares. La Subteniente habitaba en una villa, donde había otros ocho dormitorios, pero no todos estaban ocupados.
- La indagación se complica, dijo Montoya, porque en estas residencias no hay cámaras de videovigilancia, tampoco en el destacamento militar.
- Otra de las pericias de este miércoles era realizar la prueba de luminol, para examinar cualquier rastro de sangre o fluido corporal, que pueda ayudar en las investigaciones del presunto femicidio.
Por otra parte, la abogada de la familia reiteró que están pidiendo la revocatoria de medidas cautelares contra los oficiales, puesto que ninguno de los cuatro está bajo prisión preventiva.
Además, Montoya explicó que en el caso de la subteniente Ati no solo se investiga el femicidio, sino también otros delitos como fraude procesal y violación.
“Ellos (Ejército) no estaban autorizados para realizar una autopsia sin un familiar directo, con qué permiso se autorizó ese procedimiento”, dijo Montoya, sobre la acusación de fraude procesal.
Mientras que, como indicó antes del abogada, el posterior examen al cuerpo de la Subteniente reveló que ella fue golpeada y tenía moretones cerca de sus partes íntimas.
En efecto, desde el pasado 1 de julio, los familiares de Ati aseguraron que la joven militar fue asesinada, versión que contrasta con un comunicado del Ejército, que inicialmente mencionaba una muerte por “asfixia producida por una obstrucción de vía aérea mientras dormía”.
Luis Ati, padre de la joven, señaló a medios locales que la de su hija no fue una muerte natural.
“La ahorcaron, la mataron, y le ultrajaron, le pegaron y, presuntamente, la violaron”, dijo Ati durante el sepelio de su hija.
Fuente: Primicias
