Desde esta mañana agentes desvían los buses que transitan por Esmeraldas hacia la calle 10 de Agosto para que continúen sus viajes al norte por vías alternas.
La Dirección de Obras Públicas realizará trabajos de apuntalamiento del edificio Fantasía, ubicado en la avenida 9 de Octubre entre Esmeraldas y José Mascote. Esto comenzará desde este sábado, 29 de junio.
Esta medida se aplicará durante dos meses en la estructura que registra un hundimiento e inclinación progresivo.
Esta situación motivó el desalojo del predio e inicio de análisis de la situación para determinar el proceso de demolición.
Por estas labores, la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) tomará acciones en materia de su competencia.
Desde este viernes, 28 de junio, se darán cierres viales en la calle Esmeraldas, entre Hurtado y av. 9 de Octubre, y además en la av. 9 de Octubre, entre Los Ríos y José Mascote (ambos sentidos).
Desde esta mañana agentes desvían los buses de transporte público que transitan por Esmeraldas hacia la calle 10 de Agosto para que continúen sus viajes al norte por vías alternas.
En la calle Esmeraldas, por ahora, se permite el paso de autos livianos hasta la calle Hurtado.
De su parte, los moradores de este sector del centro de Guayaquil han expresado su preocupación porque, según ellos, en estos días el edificio ha cedido en su inclinación.
Gustavo Rivadeneira, dirigente del sector, mencionó que según información de la dirección municipal de Gestión de Riesgos la estructura solo hoy se inclinó 10 centímetros más.
“Y esto se debe a la fuerte vibración que causan las líneas de transporte público que pasan por la calle Esmeraldas, que es excesiva. Hay demasiadas líneas de buses y tiembla todo el sector. Y este temblor, esta vibración es lo que está acelerando la inclinación del edificio Fantasía”, mencionó él.
Trabajadores de la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL), Interagua y empresas de telecomunicaciones iniciaron labores en las cercanías del edificio Fantasía, con la remoción de cableado, este viernes 28 de junio.
La fase de apuntalamiento, que se iniciará desde este sábado consistirá en la instalación de una estructura en la parte delantera y otra en la trasera para sostener como un anclaje para evitar cualquier avance de inclinación del predio.
Además se removerá cierta mampostería de la parte delantera del inmueble.
Alex Anchundia, gerente de Segura Ep, dijo que se coordinará con propietarios de vecinos y comerciantes para que conozcan de estas labores.
Por el momento no se desalojará a ningún vecino, indicó Anchundia.
El Municipio aplicará los mecanismos para que los propietarios sean quienes respondan por rubros que demanden estos procesos, incluyendo que posteriormente se avance con la demolición, cuyo procedimiento aún se debe definir. (I)