Diez familiares del líder político de Hamás en el exilio, Ismail Haniyeh, se encuentran entre las 24 personas muertas en los más recientes ataques israelíes en la Franja de Gaza.
Entre las víctimas mortales se encuentra una hermana de Haniyeh, confirmaron funcionarios de salud del enclave.
Los hechos se produjeron en tres asaltos aéreos por separado durante la madrugada de este martes 25 de junio.
Dos de las embestidas israelíes alcanzaron dos escuelas en la Ciudad de Gaza, en el norte del territorio, donde al menos 14 personas fueron asesinadas. El tercer asalto tuvo lugar contra una vivienda en Shati, uno de los ocho campamentos de refugiados del sitiado enclave. Allí otras 10 personas murieron.
La residencia bombardeada en Shati pertenecía a la familia de Haniyeh, quien reside en Qatar.
El rostro público de la diplomacia de Hamás ya ha perdido decenas de familiares desde que inició la ofensiva israelí el pasado octubre, incluidos tres de sus hijos.
Según la versión de las tropas de Benjamin Netanyahu, se trató de asaltos contra militantes de grupos palestinos armados que, según sostiene, participaron en la planificación del sorpresivo ataque del movimiento islamista hace más de ocho meses en el sur del Estado de mayoría judía, que desató las hostilidades actuales.
La Fuerza Aérea atacó dos estructuras “utilizadas por terroristas de Hamás en Shati y Daraj Tuffah, en el norte de la Franja de Gaza. Los terroristas operaban dentro de recintos escolares que Hamás utilizaba como escudo para sus actividades terroristas”, indicó un comunicado de la institución castrense.
Pero el grupo que controla Gaza desde 2007 subrayó que estas recientes acciones de las fuerzas israelíes demuestran que actúan de forma intencional contra civiles.
En una declaración escrita, Hamás responsabilizó a la Administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, “de la continuación del genocidio contra el pueblo palestino en Gaza al dar (a las fuerzas israelíes) cobertura política y militar para la destrucción”.
Además, el grupo islamista pidió a la Organización de Naciones Unidas (ONU) y a la comunidad internacional que asuman “sus responsabilidades ante estos crímenes horribles en curso, tomen medidas urgentes para proteger a los civiles inocentes y exijan cuentas de sus crímenes a los líderes terroristas de (las fuerzas israelíes)”.
ONU: al menos medio millón de palestinos sufren hambre extrema
En medio de los incesantes ataques por aire y tierra, el riesgo de hambruna continúa en toda la Franja de Gaza, destaca el más reciente informe de Clasificación Integrada de la Fase de Seguridad Alimentaria (IPC, por sus siglas en inglés), herramienta utilizada por agencias de Naciones Unidas.
Los expertos advierten que al menos 495.000 personas, el 22% de los gazatíes, sufre hambre extrema, mientras otros 745.000 habitantes del enclave se encuentran en el nivel cuatro de una escala de cinco en materia de inseguridad alimentaria aguda.
Se trata de la última fase antes de llegar a la hambruna, denominada emergencia humanitaria, que se refiere a la grave escasez de alimentos.
“En esta etapa, las familias enfrentan grandes brechas en el consumo de alimentos junto con tasas muy altas de desnutrición aguda y un exceso de muertes, o pueden superar las brechas en el consumo de alimentos solo vendiendo los pocos activos que les quedan. La pérdida de ingresos en esta etapa es irreversible y entre el 15 y el 30 % de la población sufre desnutrición aguda”, explica el Programa Mundial de Alimentos de la ONU.
La IPC subrayó que si bien el aumento en la entrega de alimentos por parte de las agencias humanitarias entre marzo y abril parecían haber reducido la gravedad del hambre en el norte de Gaza, las mejoras podrían revertirse rápidamente ante los nuevos obstáculos para proveer elementos básicos para la supervivencia.
“El espacio humanitario en la Franja de Gaza sigue reduciéndose y la capacidad de prestar asistencia de forma segura a las poblaciones está disminuyendo. La trayectoria reciente es negativa y sumamente inestable”, destaca el informe.
Previamente, la ONU ya había señalado riesgo de hambruna en el norte de la Franja, la zona que ha encarado las mayores dificultades para acceder a asistencia desde que detonó la escalada del conflicto.
Fuente: France 24