Los inversores de Wall Street se dieron un susto importante en la mañana del lunes. Un problema técnico en la Bolsa de Nueva York provocó que las acciones de clase A de Berkshire Hathaway, propiedad de Warren Buffett, parecieran haber bajado 99,97 por ciento. Es un derrumbe sólo compatible con una disolución casi completa de una empresa. Y no era una empresa cualquiera, sino uno de los fondos de inversión más respetados del mercado.
No fue el único valor negociable afectado por el mismo problema. Como resultado de las bajas inexplicables, se interrumpió la negociación de las acciones de Berkshire Hathaway, así como la de Barrick Gold y Nuscale Power, que también habían registrado caídas drásticas.
La Bolsa de Nueva York informó a las 11 de la mañana de Buenos Aires que estaba investigando un problema técnico relacionado con las bandas de limitación al alza y a la baja, que son mecanismos para detener las acciones en caso de volatilidad excesiva.
Hubo menos de 4.000 operaciones registradas en el día para las acciones de clase A de Berkshire cuando se detuvo la negociación. La negociación continuó en las acciones de clase B, que bajaron menos de un 1% el lunes por la mañana. Los movimientos no parecieron tener efecto en el valor de los principales índices del mercado.
En días normales, las acciones originales de clase A de Berkshire tienen uno de los precios más altos de Wall Street. La semana pasada, cada una se vendió por un 45% más que el precio medio de una vivienda en EEUU. Las acciones de clase A alcanzaron un máximo histórico de USD 634.440 el 28 de marzo.
Esto se debe a que Buffett nunca ha dividido las acciones, ya que quiere atraer a accionistas orientados a la inversión con horizontes a largo plazo. El protegido de Ben Graham ha dicho que muchos accionistas de Berkshire utilizan sus acciones como una cuenta de ahorros.
Berkshire emitió acciones de Clase B en 1996 a un precio igual a una trigésima parte de una acción de Clase A para atender a los pequeños inversores que desean una pequeña parte del rendimiento de Buffett.
Buffett es el mayor accionista de Berkshire, ya que posee más del 38% de las acciones de clase A, según FactSet. El «Oráculo de Omaha» se comprometió a regalar la fortuna que construyó en Berkshire, el conglomerado con sede en Omaha que empezó a dirigir desde 1965.
Quién es Warren Buffett
Warren Buffett, conocido como el “Oráculo de Omaha”, es una de las figuras más icónicas y respetadas en el mundo de las inversiones y las finanzas. Nacido el 30 de agosto de 1930 en Omaha, Nebraska, Buffett es el presidente y CEO de Berkshire Hathaway, una empresa holding con inversiones en una amplia gama de sectores. Su estilo de inversión, centrado en la adquisición de empresas infravaloradas con sólidos fundamentos y perspectivas a largo plazo, le ha permitido amasar una de las mayores fortunas del mundo, y su enfoque en la filantropía ha marcado un precedente significativo en el ámbito de la responsabilidad social.
Desde una edad temprana, Warren mostró un notable interés por los negocios y las inversiones. A los 11 años compró sus primeras acciones y, a los 13, ya trabajaba como repartidor de periódicos, utilizando sus ganancias para invertir en diversas oportunidades. Se graduó en la Universidad de Nebraska y posteriormente completó una maestría en economía en la Universidad de Columbia, donde estudió bajo la tutela del famoso economista Benjamin Graham, conocido como el “padre del análisis fundamental”.
Buffett comenzó su carrera profesional en la empresa de Benjamin Graham, Graham-Newman Corp., donde aprendió los principios del “value investing”, un enfoque que busca invertir en acciones que se cotizan por debajo de su valor intrínseco. En 1956, fundó Buffett Partnership Ltd., y en 1965, tomó el control de Berkshire Hathaway, una entonces modesta compañía textil, transformándola en un gigante multinacional.
El enfoque de Buffett se caracteriza por su paciencia y su perspectiva a largo plazo. Prefiere invertir en empresas con una ventaja competitiva duradera, buenos equipos de gestión y precios razonables. Entre sus inversiones más notables se encuentran compañías como Coca-Cola, American Express, Apple y, más recientemente, grandes bancos y firmas tecnológicas.
La capacidad de Buffett para generar retornos consistentes ha sido excepcional. A lo largo de los años, Berkshire Hathaway ha superado significativamente al índice S&P 500, convirtiéndose en un referente para los inversores de todo el mundo. Su éxito le ha ganado numerosos premios y reconocimientos, incluyendo ser considerado repetidamente en la lista de las personas más ricas del mundo por la revista Forbes.
Warren Buffett es también conocido por su compromiso con la filantropía. En 2006, anunció su intención de donar el 99% de su fortuna a causas benéficas, principalmente a través de la Fundación Bill y Melinda Gates. Este acto de generosidad ha sido un ejemplo inspirador en el mundo de los negocios y ha llevado a otros multimillonarios a hacer promesas similares. Buffett cofundó “The Giving Pledge” junto con Bill Gates, una iniciativa que invita a los más ricos del mundo a comprometerse a donar la mayor parte de su riqueza a causas filantrópicas.
A pesar de su inmensa riqueza, Buffett es conocido por su estilo de vida frugal y su humildad. Vive en la misma casa en Omaha que compró en 1958 por $31,500 y es famoso por su dieta simple y sus hábitos modestos. Este enfoque pragmático y sensato hacia la vida y los negocios le ha ganado una gran admiración.
Buffett también es un ávido lector y cree firmemente en la importancia del conocimiento y la educación continua. Pasa gran parte de su día leyendo informes financieros, libros y artículos para mantenerse informado y tomar decisiones de inversión fundamentadas.
Fuente: Infobae
