Paris Saint Germain acaricia el título de la Ligue 1, una competición que ha dominado durante la última década de forma incontestable y que se le queda pequeña porque no hay rival, salvo en algún momento puntual, que le plante cara. El conjunto parisino venció sin problemas al Lorient, 1-4 y depende de sí mismo para ser campeón la próxima jornada. Mbappé, con un doblete y una asistencia, esta última con una maravilla técnica, fue la gran estrella de un apeadero total para los de Luis Enrique.
No le hizo falta a Luis Enrique ni sacar a sus mejores jugadores para vencer a un rival menguado por el descenso. Dejó en París a Marquinhos, Achraf, Zaïre-Emery o Vitinha, entre otros. Esta plantilla, tal y como subraya el técnico asturiano, “tiene 23 titulares”, por lo que, aunque el partido ante el Dortmund esté a la vuelta de la esquina, la realidad es que ha usado más de 40 onces distintos a lo largo de la temporada.
En la Bretaña francesa, el casi campeón de la Ligue 1 sufrió, eso sí, en los primeros minutos, porque enfrente había un equipo, el Lorient, que se estaba jugando el todo o nada por el descenso. Los de Le Bris, incluso, tuvieron una oportunidad para marcar el 1-0, pero el remate de Kari, cedido por el PSG, se marchó desviado.
Los francilianos volvieron a demostrar que no necesitan ni siquiera hacer un buen partido para imponerse. En dos minutos marcó dos goles y sentenció la contienda. Primero, por medio de Dembélé, enchufadísimo en los últimos encuentros, anotando un gran gol con la izquierda después de dos fintas extraordinarias. Y segundo, Mbappé, que, casi sin querer, con la izquierda de espuela, batía a Mvogo y dejaba al borde del precipicio al Lorient.
Tras la salida de vestuarios, el guion fue prácticamente el mismo, aunque el PSG, como era de esperar, pensando en la Champions, aminoró el ritmo, pero todavía faltaba Mbappé para deleitarnos con una maravilla. En un gesto técnico espléndido, rompiendo a su marca, el capitán de ‘Les Bleus’ asistió a Dembélé, que marcó a portería vacía. Con su hermano entrando en el campo, Ethan, el PSG se relajó, permitiendo que Bamba marcara el 1-3 con un testarazo maravilloso. Antes del pitido final, como un obús, con una potencia desmedida, con un movimiento marca de la casa, Mbappé le puso la puntilla al partido, por si todavía no estaba sentenciado, batiendo al palo largo a Mvogo y sellando el triunfo de los de Luis Enrique, que la próxima jornada pueden ser campeones.
Fofana aplaza el alirón del PSG
Con un tanto de Youssouf Fofana, el Mónaco ganó 1-0 al Lille y aplazó el alirón del París Saint-Germain, que tendrá que esperar a la próxima jornada para proclamarse campeón de la Ligue 1 por duodécima vez en su historia. Los hombres dirigidos por Adi Hutter sufrieron para sacar los tres puntos adelante. El Lille planteó mucha resistencia y tuvo varias ocasiones para llevarse el partido y dar el título al París Saint-Germain. Sin embargo, se encontró con el portero Radoslaw Majecki, que salvó todos los intentos de sus rivales.
El Niza, pese a jugar con un hombre más toda la segunda parte por la expulsión de Faris Moumbagna, firmó un sufrido empate en el Estadio Vélodrome ante el Olympique Marsella (2-2) y, con la derrota del Lille en Mónaco (1-0), mantuvo sus opciones de alcanzar la cuarta y última plaza con acceso a la próxima edición de la Liga de Campeones.
