En una semana, desde el 1 de mayo próximo, entrará en vigencia el acuerdo comercial entre Ecuador y China y existe expectativa de cuáles serán los primeros resultados de este tratado alcanzado con el gigante asiático en mayo del 2023.
Según las últimas cifras compartidas por la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), basadas información oficial del Banco Central del Ecuador (BCE) del comercio exterior entre enero y febrero de 2024, China se ubica entre los principales socios comerciales de Ecuador. Estados Unidos fue el primer destino para la oferta no petrolera no minera del Ecuador.
Durante este periodo, las exportaciones no petroleras no mineras al país norteamericano aumentaron en 14 %. La Unión Europea, como segundo destino comercial, registró un incremento del 11 % en el mismo periodo. Junto con China, que sin embargo registró una caída del 29 % en exportaciones. Estos tres principales destinos concentraron el 62 % del valor exportado no petrolero no minero.
Déficit comercial con China creció 117 % en 2024
Otro dato no menos importante en estos intercambios comerciales entre Ecuador y sus principales destinos es la balanza comercial. De sus tres principales socios, China es el único país con el que Ecuador mantiene una balanza comercial deficitaria. Con Estados Unidos, Ecuador mantiene un superávit de $ 327 millones en balanza comercial, pues en enero y febrero exportó $ 729 millones e importó $ 402 millones.
Con la UE sucede algo similar. Ecuador goza de un saldo positivo de $ 291 millones con ese bloque a donde exportó $ 679 millones e importó $ 388 millones en el primer bimestre del año. Sin embargo, la relación comercial con China contrasta, pues en los dos primeros meses del 2024 Ecuador acumula un déficit de $ 404 millones, pues importó más de los que exportó. Según el BCE, Ecuador generó $ 540 millones en exportaciones, pero importó $ 944 millones.
Este saldo negativo de la balanza comercial con China se traduce en un incremento del 117,20 % con respecto al indicador del mismo periodo del 2022 que fue de $ 186 millones ($ 760 millones en exportaciones y $ 946 millones en importaciones). Sin embargo, el déficit de este año es ligeramente inferior, con el 4,04 %, al del 2022 que se ubicó en $ 421 millones. En esa ocasión Ecuador exportó $ 687 millones a China, pero importó $ 1.109 millones desde el gigante asiático.
Para el experto económico, Alberto Acosta Burneo, editor de Análisis Semanal, los resultados de la entrada en vigor del acuerdo comercial con China se sentirán gradualmente y asegura que el tratado dinamizará tanto las exportaciones ecuatorianas hacía China como las importaciones a Ecuador desde ese país, que en su mayoría son materias primas e insumos para la producción.
“China es un importante proveedor de materias primas, de bienes de capital, lo cual es muy importante para el país porque esto va a construir competitividad para el sector productivo, permite importar bienes más baratos para incorporarlos al proceso productivo y así construir competitividad en la producción”, analizó Acosta Burneo.
En cuanto a las exportaciones ecuatorianas resalta productos que van a poder crecer inmediatamente como la Pitahaya que desde el próximo miércoles dejará de pagar el 20 % de arancel para ingresar a ese mercado. Para Acosta la entrada en vigencia de este acuerdo abre una gran oportunidad de inversión en muchos sectores sobre todo de la agroexportación que van a poder ver beneficios inmediatos de la apertura de un mercado de 1.425 millones de consumidores.
Como resultado, Acosta Burneo indica que la actividad económica en el país se verá beneficiada: “va a ver más opciones de inversión, incremento en al producción y finalmente creación de empleos. Ese va a ser el impacto, es un proceso gradual, requiere de inversión y la inversión toma tiempo, pero vamos a comenzar a sentirlo a partir que entre en vigor el acuerdo”.
Las importaciones desde China crecerán más rápido ¿Es negativo?
Con este contexto, específicamente sobre la balanza comercial, el experto cree que en corto plazo deben crecer más rápido las importaciones, porque para tener un impacto inmediato no requieren de inversiones como en el caso de las exportaciones. “Para exportar más productos agrícolas hay que invertir, hay que sembrar, hay que cosechar y eso toma tiempo. Una reacción más rápida van a tener las importaciones”, adelanta Acosta Burneo.
No obstante, aclara que esto no es negativo para el país, pues reitera que se van a importar insumos y bienes de capital más baratos para mejorar la producción nacional y la competitividad. Analiza que el ritmo de expansión de las importaciones desde China dependerá del ritmo de crecimiento de la producción nacional. “Si es que la inversión nacional y la producción crece aumentarán más las importaciones, si la producción nacional se mantienen limitadas se van a ver limitadas las importaciones de insumos y bienes de capital”, relaciona Acosta Burneo.
En conclusión, proyecta que va a crecer el déficit de la balanza comercial con China, pero gradualmente se reducirá conforme vayan creciendo las exportaciones. Sin embargo, el experto aclara que la evaluación de la balanza comercial con países específicos no es importante en comparación con la balanza global al señalar que las importaciones totales se ajustan en función de las exportaciones totales. “Ya lo vivimos claramente durante la pandemia, que las exportaciones se desplomaron, sobre todo del lado petrolero, y las importaciones cayeron aún más rápido, porque las importaciones dependen de la actividad productiva nacional, cuando se contraen las importaciones”, analiza.
El analista económico, Jorge Calderón, coincide con Acosta Burneo, en que revertir la tendencia del déficit comercial con China no dará a corto plazo, sino a mediano plazo, unos 7 u 8 años según sus cálculos. “Esperemos que sea antes, pero sin duda será a un mediano plazo que pueda alcanzarse un saldo positivo y revertirse esa tendencia”, manifiesta el experto.
Afirma que el enfoque de Ecuador será importar más bienes de capital e insumos desde China para mejorar sus capacidades productivas y tener superávit comerciales con otros países y apuntar a un superávit global al de carácter comercial y no solo particular con China.
Fuente: El Universo
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