El dólar libre acumula una baja de $30 en las últimas cinco ruedas y se acomoda debajo de la barrera psicológica de $1.000 para la venta en el circuito marginal. Y los dólares financieros, si bien rebotaron moderadamente sobre el cierre de la semana, se mantienen alrededor de ese nivel.
La tendencia bajista sorprendió a muchos, al punto que las colocaciones de pesos a plazo fijo tradicionales funcionaron como una herramienta de carry-trade con resultados impresionantes: 30% de ganancia en dólares en febrero.
“Le diría que mi mirada es de stand by, con inclinación a compra”, comentó Truffa.
“Estoy más cerca de stand by si se mantiene el esquema actual, al costo de frenar mucho la actividad económica. Ahora, si aceleran el ritmo del crawling peg o eliminan algunas restricciones cambiarias del cepo para evitar una apreciación mayor, compro”, agregó el economista.
Por su parte, el analista Gustavo Ber coincidió en que la actual cotización de los dólares libres podría ser un buen punto de entrada para comprar: “Sin necesidad de pesos, ni un perfil agresivo con apetito por el ‘carry-trade’, estaría para comprar a partir de los $ 1.000 dentro de una economía todavía con una elevada nominalidad”.
Sin necesidad de pesos, ni un perfil agresivo con apetito por el ‘carry-trade’, estaría para comprar (Ber)
Ber advierte que “la apreciación cambiaria ha sido muy fuerte, con perspectivas incluso de extenderse próximamente, y la economía aún necesita de un tipo de cambio real más alto a fin seguir acumulando reservas”.
Más confiado en la continuidad de la apreciación del peso, el asesor financiero Salvador Di Stéfano sostiene, en cambio, que “hay carry tradepara rato”.
Desde hace meses, Di Stéfano recomienda buscar activos indexados o con buen rendimiento en pesos bajo la hipótesis de que el esquema del ministro de Economía, Luis Caputo, iba a sostener a la inflación y a la tasa de interés por encima del movimiento de los dólares. Para su visión, ese proceso todavía no terminó.
“Mientras la tasa de interés esté en el 110% anual, eso te da una tasa efectiva del 187% y la inflación futura está en torno de 120% a 130%. Tenés tasa de interés positiva, tenés una recesión increíble que la gente cambia dólares, tenés oferta de Bopreal que hace que haya dólares ofertados y tenés toda la cosecha de soja que se está exportando en donde 20% se oferta en el dólar contado con liquidación. Así que lo que tenés es una oferta monumental de dólares y por otro lado no tenés emisión monetaria y no hay pesos que demanden dólares, o sea que no tenés combustible para los dólares, y tenés oferta de dólares”, explicó Di Stéfano.
Ariel Sbdar, de Cocos Capital, admite que está parado del lado de los compradores, aunque no porque tema una disparada de la divisa: “Básicamente no creo que el dólar siga bajando. La baja fuerte que vimos en las últimas semanas se debió a que la presión de los exportadores es muy alta, pero en este nivel, donde el contado con liqui está de hecho cerca del precio del que pagan los importadores, veo que hay un piso importante”.
Hay que tener en cuenta que el oficial viaja el 2% mensual, así que puede ser que el contado con liquidación haya llegado al piso (Sbdar)
“¿Eso significa que va a volar? No. Significa que para mí por el momento, por el corto plazo, el tipo de cambio se acerca a un mínimo. Ahora, hay que tener en cuenta que el oficial viaja el 2% mensual, así que puede ser que el contado con liquidación haya llegado al piso. El tema es la velocidad a la que va a subir, porque como el oficial sube a una velocidad muy baja, puede ser que el contado tenga piso, pero el rebote no sea en ‘V’, sino que veamos por lo menos una estabilización y tal vez una suba muy moderada. Lo que yo veo es que no va a seguir bajando mucho desde este punto”, agregó Sbdar.
También del lado de los compradores se ubicó el asesor financiero Christian Buteler. “Compro, sin dudas”, dijo a este medio.
“Me parece que esa brecha que se armó entre lo que subió la inflación y lo que se movió el dólar se va a cerrar por una suba del dólar mucho más que por cualquier baja de los precios”, consideró.
“Ees insostenible tener una inflación que fue del 70% o 75% en los últimos tres meses, veremos la semana que viene cuando se conozca el dato de febrero, y un tipo de cambio que no sube. La verdad uno puede esperar que en el 2024 la inflación le gane al dólar, lo que no es esperable es que la brecha sea tan grande”, agregó.
Además, sostuvo, que reducciones en la cantidad de dinero por la colocación del Bopreal o recompra de deuda por parte del Tesoro al Banco Central no se van a poder mantener al mismo ritmo, lo que indicaría que el billete está cerca de un piso.
Fuente: Infobae