El sindicato Ver.di anunció la paralización total de metro, tranvía y buses en prácticamente todo el país, como medida de presión ante el nulo avance de las negociaciones con los empleadores.
El sindicato del sector servicios Ver.di convocó este lunes (29.01.2024) una huelga de advertencia de un día para este viernes 2 de febrero en el transporte público local y de cercanías de Alemania, después de que las diversas negociaciones salariales en los diferentes estados federados no arrojaran resultados, según informa la prensa local.
Con la excepción de Baviera, en el sur del país, Ver.di está negociando -de momento, sin avances- nuevos convenios colectivos para los empleados del transporte público de todos los estados federados en paralelo con las patronales municipales. «Ha llegado el momento de poner más presión a los empleadores”, dijo la representante de Ver.di, Christine Behle, en Berlín.
La negociación salarial o de condiciones de trabajo, según el caso, afecta a más de 130 empresas municipales y a un total de 90.000 empleados de ciudades y distritos y en la primera ronda, celebrada la semana pasada, no se llegó a ningún acuerdo en ningún estado federado. La noticia de esta nueva huelga se conoce apenas horas después que finalizara una paralización de los maquinistas de trenes, otra pieza vital del complejo entramado del transporte público germano.
Poco personal y mucha presión
Por medio de un comunicado, el sindicato explicó que parte central de las negociaciones son una serie de mejoras en las condiciones de trabajo de los operarios, como una reducción de la jornada laboral e incrementos en los beneficios y vacaciones, aunque las exigencias varían fuertemente entre una región y otra. En Berlín se buscan horarios de trabajo más cortos y en Brandeburgo, por ejemplo, aspiran a incrementos salariales del 20 por ciento.
Pese a ello, hay elementos que son comunes a todos los estados federados. «Tenemos una escasez dramática de trabajadores en el transporte público y una enorme presión sobre los empleados. Buses y trenes cancelan sus viajes todos los días en todas las zonas del país porque no hay suficiente personal”, apuntó Behle. «Hay que encontrar soluciones pronto para aliviar la presión”, añadió.
