En la aeronave siniestrada se encontraban también seis miembros de su tripulación y tres escoltas. Volodimir Zelensky pidió una investigación internacional.
Los equipos de rescate hallaron este jueves las cajas negras del avión militar ruso Il-76 que se estrelló la víspera en la región rusa de Bélgorod con 74 personas a bordo, entre ellas 65 prisioneros de guerra ucranianos que iban a ser canjeados por soldados rusos, según informaron los servicios de emergencia.
“Según datos preliminares, el estado de ambas cajas negras permitirá su descifrado. Serán transportadas en un vuelo especial a un laboratorio del Ministerio de Defensa (en Moscú), donde se procederá al análisis de su contenido”, dijo un portavoz de emergencias a la agencia TASS.
Otra fuente, citada por la agencia RIA Nóvosti, precisó que las cajas negras se encontraban en la cola del avión.
La aeronave se estrelló este miércoles en la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Ucrania, cuando llevaba a 65 prisioneros de guerra ucranianos para su canje por soldados rusos, según la versión de Moscú, que acusó a las fuerzas de Kiev de derribar el avión con un misil antiaéreo.
Además de los soldados ucranianos, a bordo del avión siniestrado se encontraban seis miembros de su tripulación y tres escoltas.
El Kremlin aseguró el jueves que, tras el “acto monstruoso” cometido por Kiev, el futuro de los intercambios de prisioneros queda “en entredicho”.
En cambio, el jefe del comité de Defensa de la Duma (cámara de diputados rusa), Andréi Kartapólov, se mostró convencido de que, pese al siniestro, los canjes continuarían, porque Rusia “no puede abandonar” a sus soldados.
“Hablaremos (con la parte ucraniana) partiendo de la realidad, los sucesos que pasen y conscientes del tipo de gente con la que tratamos”, afirmó.
El último gran canje entre Rusia y Ucrania se efectuó el 3 de enero, cuando Kiev entregó a Moscú a 248 militares rusos a cambio de 230 soldados ucranianos.
Según Kartapólov, en el intercambio de ayer tenían que participar 192 personas, pero esos planes fueron abortados tras el derribo del avión ruso.
Zelensky pide una investigación independiente
El presidente ucraniano Volodimir Zelensky pidió este miércoles una investigación internacional sobre la caída del avión ruso que, según Moscú, transportaba presos ucranianos destinados a un intercambio.
“Es evidente que los rusos juegan con las vidas de los presos ucranianos, con los sentimientos de sus familiares y las emociones de nuestra sociedad”, declaró en su mensaje diario, sin confirmar o desmentir que las víctimas eran o no presos de su país.
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá este jueves a las 17:00 hora local (22:00 GMT) para tratar la caída del avión ruso en la mañana del miércoles en Ucrania.
El Il-76 se estrelló a unos 50 kilómetros de la frontera ucraniana después de que se oyeran explosiones en el aire, según testigos oculares citados por las agencias rusas. Según Moscú, viajaban a bordo 65 presos ucranianos listos para un canje por presos rusos, tres guardianos rusos y el resto tripulantes.
En las redes sociales de Belgorod se pueden ver imágenes con el Il-76 precipitándose contra la tierra a una gran velocidad y estallando en un descampado.
El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, subrayó esta mañana en la ONU que Ucrania primero se jactó del derribo del avión en una publicación digital, pero luego retiró la publicación, algo que según él confirmaba la autoría ucraniana del derribo, aunque fuera por error.