China está pendiente del proceso interno que se lleva a cabo en Ecuador sobre el acuerdo comercial que firmaron ambas naciones, que actualmente se encuentra en la Asamblea Nacional pendiente de que se retome el debate y su posterior votación, así lo afirmó Gustavo Cáceres, presidente de la Cámara de Comercio Ecuatoriana-China.
El dirigente indicó que el país asiático, “a través del vocero de la República Popular China aquí en Ecuador, el embajador Chen Guoyou, está muy al tanto de lo que se está desarrollando acá”. Agregó que el diplomático “ha participado de forma activa” en conversatorios, reuniones con diferentes representantes en la Asamblea con la intención de dar a conocer justamente los beneficios de forma técnica y práctica de lo que el acuerdo involucra tanto para Ecuador como para China.
“Entiendo que ha habido conversaciones, acercamientos para tratar de socializar más el tema porque muchas de las posturas que se dieron en este primer debate resaltaban de que era un poco de desconocimiento, en algunos, una postura política, que estamos opuestos a eso, porque esto es un proyecto en favor del país, que no debería de ser aprobado o no por una postura política”, afirmó Cáceres.
Posturas en contra y a favor del acuerdo, que fue firmado en mayo del 2023, se han vuelto más evidentes en las últimas semanas. Por un lado algunas organizaciones sociales han expresado preocupación si es que se ratifica el tratado, mientras que los que respaldan resaltan los beneficios una vez que el instrumento comercial entre en vigencia.
El pronunciamiento más reciente fue de siete exministros de Comercio Exterior, que pidieron a la Asamblea Nacional que lo ratifique. El pasado 11 de enero el Pleno de la Asamblea empezó a tratar el texto del acuerdo, sin embargo, la sesión fue suspendida y hasta la fecha se desconoce de cuándo se reinstale la sesión para continuar el debate.
De acuerdo con Jonathan Parra, de la alianza oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), el presidente de la Asamblea Nacional (Henry Kronfle) tiene la atribución de reinstalar la sesión para seguir en el debate del acuerdo.
De acuerdo con Cáceres, los asambleístas de la bancada de Construye y Gente Buena son quienes están mostrando dudas, en tanto que la social cristiana y la oficialista Acción Democrática Nacional de forma abierta han expresado su postura a favor, mientras que la bancada de Revolución Ciudadana ha mostrado un rotundo no por considera que es un proyecto del gobierno anterior y que por eso no debe ser debatido. “Hay todavía personas que quizás, porque no se ha socializado en su totalidad del documento, no están convencidos, pero estamos trabajando en eso para que la próxima semana pueda ser aprobado”, reveló.
Parra, quien que preside la Comisión de Relaciones Internacionales y Movilidad Humana y en donde se elaboró el informe del acuerdo, indicó que a través de los diferentes medios de comunicación está dando a conocer “la verdad del documento” y de lo positivo que es para el país está ratificación, dada su importante reactivación económica y generación de empleo, dinero que hace falta en estos duros momentos en el Ecuador. “Estoy seguro que los compañeros asambleístas elevaremos el debate y sin mentiras ni odios vamos a debatir, como merece el pueblo ecuatoriano”, dijo.
Mientras que Cecilia Chérrez, quien es parte de la red Ecuador Decide Mejor sin TLC, indicó que tras haber realizado la carta abierta dirigida a los asambleístas sobre el acuerdo comercial, emitieron un pronunciamiento, que constituye básicamente una alerta de lo que podría pasar al interior de la Asamblea Nacional después de que se levantó la sesión de manera intempestiva. “Pensamos que hay un escenario de presiones a los asambleístas que podrían estar buscando tener los votos para una aprobación del acuerdo, para nosotros es importante señalar que las organizaciones sociales, la población en la provincias también pueda acercarse a sus legisladores y pedirles la postura en defensa de los derechos humanos, el derecho de la naturaleza y no subordinar a las presiones que estuvieran haber con estos cálculos que están detrás del acuerdo”, dijo.
Chérrez agregó que se han encontrado con sectores sociales muy sensibles al hecho de que el acuerdo “constituya una puerta abierta al ingreso de desechos de China que puedan afectar gravemente a territorios campesinos, indígenas, de afrodescendiente”, por lo que se mantienen vigilantes, así como en actividades de socialización de exponer las alertas en algunas provincias, para que haya mayor información y que pueda estar pendiente del curso dentro de la Asamblea Nacional.
“Desechos son utilizados por industria en modo de reciclaje”
Según Cáceres, el argumento que al entrar en vigencia el acuerdo comercial se utilizaría como “destinos de desechos” al país ha sido desmentido en las múltiples declaraciones de la ministra de Producción, Sonsoles García, por los exministros, incluso desde la misma Cámara, por lo que “el acuerdo comercial no cambia nada las condiciones actuales que tiene el país” y esto porque es prohibido por la Constitución, por el Código Orgánico Medioambiental y por leyes establecidas en el Ministerio de Producción.
Además, que en la actualidad los desechos que se importan para ser reciclados y convertidos en nuevos productos, su principal país de origen es los Estados Unidos. “No es que vamos a poder traer desechos para tirarlos aquí en un parque, en un río, en un terreno baldío, no, se trata de desechos que son utilizados para que la industria los transforme a modo de reciclaje, a modo de esta economía circular en productos finales. No vemos ningún sentido de que un empresario ecuatoriano quiera importar basura…”, afirmó.
En tanto, Chérrez, que también es parte de Acción Ecológica, señaló que “obviamente los actores políticos que se han pronunciado tienen su perspectiva”, sin embargo, desde las organizaciones sociales tiene su postura en contra porque están basándose en el texto del acuerdo. “Han hablado inclusive de que las medidas ambientales son firmes, pero no es así, hemos encontrado varios artículos en donde se deja una altísima discrecionalidad en el control ambiental, eso nos lleva a plantear a la Asamblea Nacional que no puede aprobar sin hacer un estudio a fondo del contenido del acuerdo”, afirmó.
En ese contexto, la activista exhortó al Legislativo a que abra un espacio de diálogo con las organizaciones sociales. “Hay una plataforma muy grande de organizaciones sociales que estamos haciendo un análisis del acuerdo y haciendo alertas permanentemente. El último pronunciamiento que hicimos supera ya las 120 organizaciones que adhieren al pronunciamiento de alerta”, señaló.
No obstante, de acuerdo con Cáceres, en caso de ser aprobado el acuerdo en el debate, el siguiente paso es que a través de Cancillería se envía el comunicado al gobierno chino, dando a conocer que Ecuador ha cumplido con todos lo que especifica la Constitución y se esperaría la contestación de China. “Conozco por parte de la embajada (que) es positiva, quiere decir que estamos en un momento en el que el acuerdo depende 100 % de la decisión de nuestras asambleístas porque por el lado del gobierno chino ha sido aprobado”, enfatizó. (I)
Fuente: El Universo