El mercado espera que la inflación siga en niveles elevados en enero e incluso que 20204 supere la medición interanual de 2023, que se ubicó en 211,4%, según dio a conocer el jueves el Indec. Es un dinámica que impactaría con fuerza en los primeros meses del año, a medida que el Gobierno actualice ciertos valores de la economía que están atrasados, como las tarifas de luz, gas y transporte.
Esos son algunas conclusiones que se desprenden del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), que elabora mensualmente el Banco Central. Los principales economistas del país, que fueron consultados para elaborar el informe durante el 27 y 29 de diciembre, prevén que 2024 termine con una inflación acumulada de 213%. Es un valor que se encontró 21,2 puntos porcentuales por encima de la encuesta previa.
Los números más altos se registrarían durante los próximos meses. En enero, el costo de vida de los argentinos se encarecería un 25,3% (parecido a diciembre); para febrero, la medición recortaría a 18,2%; en marzo, un mes “caliente” por el inicio de clases, el índice se ubicaría en 14,9%; para abril, caería a 12,4%, valores que ya se presentaron durante la gestión de Sergio Massa en Economía; en mayo marcaría un 10,9% y en junio, 9,8%. Para tomar como referencia, para diciembre de 2023 los economistas habían pronosticado una inflación del 28%, cuando la medición oficial fue de 25,5%.
También hubo pronósticos para el tipo de cambio oficial mayorista. En enero, los economistas consideran que el Gobierno mantendrá un ritmo de devaluación del 2% mensual para esta cotización, tal como fue adelantado desde el oficialismo tras la devaluación. Así, terminaría el primer mes del año a $820,3 (hoy se vende a $815,40).
Sin embargo, para que el dólar mayorista no se atrase frente al fuerte avance de los precios de la economía, en febrero las microdevaluaciones deberían acelerarse para terminar el mes a $870 (6% de crawling peg, también por debajo de la inflación), según la previsión de los analistas. Para diciembre 2024, esta cotización costaría $1700.
Estas variables tendrían impacto en el nivel de actividad y, según los analistas consultados por el REM, la economía caería este año 2,6% frente al año anterior. Es un pronóstico que ya había realizado el propio presidente Javier Milei, quien advirtió que este año la Argentina entraría en un período de estanflación (una combinación de inflación alta y caída de la actividad económica). Si bien es un estado en el que se encuentra el país hace rato, la tendencia se consolidaría aún más.
Fuente: La Nación