Sorpresa a la medianoche. La propuesta de subir del 12 al 15 % el Impuesto al Valor Agregado (IVA) por parte del presidente de la República, Daniel Noboa, causó revuelo a escala nacional e internacional.
Una de las razones es que días atrás el mandatario había señalado que no incrementaría los tributos. “Yo tampoco puedo ahogar a la ciudadanía en este momento con impuestos, porque la gente quiere que la plata le alcance”, declaró Noboa el miércoles 10 de enero de 2024.
Al siguiente día el discurso cambió, al asegurar que tomará “medidas duras económicas” porque “una guerra cuesta y cuesta dinero”. Horas después envió a la Asamblea el proyecto de Ley Orgánica para Enfrentar el Conflicto Armado Interno, la Crisis Social y Económica, con carácter urgente, el cual se basa únicamente en aumentar el IVA del 12 al 15 %.
En el exterior, el mercado internacional vio con buenos ojos la medida anunciada por Noboa, porque no estaba previsto que el jefe de Estado implemente acciones que históricamente han sido consideradas impopulares.
El anuncio causó revuelo en Wall Street y provocó el aumento del precio de los bonos de deuda de Ecuador, cuyos valores se recuperaron tras el secuestro del canal TC Televisión, cuyas imágenes dieron la vuelta al mundo.
La medida ha causado optimismo porque puede aliviar el abultado déficit fiscal, que en 2023 cerró en casi 6.000 millones de dólares. Además le abriría al país las puertas al financiamiento de los organismos multilaterales.
Según el mismo proyecto de ley, el aumento del IVA busca dar en 2024 al Gobierno 1.071 millones de dólares, que se empezarían a recaudar desde marzo. Por un año completo, el aumento del IVA espera recaudar 1.306 millones de dólares.
Pero puertas adentro, la decisión no fue bien recibida. Las bancadas en la Asamblea Nacional ya han expuesto sus posiciones. El correísmo mostró su negativa ante la propuesta para financiar la “guerra interna”.
La Revolución Ciudadana, que posee la bancada más numerosa de la Asamblea Nacional (51), adelantó que no lo apoyará. Según indicó en un comunicado, este tipo de medidas “afectan a la clase media y a los más pobres”.
Asimismo, el Partido Social Cristiano (PSC), aliado del Gobierno de Noboa, ya ‘mostró sus cartas’. Al igual que el correísmo, el coordinador de bancada socialcristiana, Vicente Taiano, adelantó a través de un pronunciamiento en redes sociales la negativa del partido. “No votaremos por la creación o aumento de ningún impuesto”, sentenció el legislador.
Mientras que el sector empresarial ha expresado su apoyo a la decisión del Gobierno, pero pide medidas de eficiencia en el gasto público. Representantes de las cámaras sugieren además que no se debe descartar la focalización de los subsidios a los combustibles.
“Entiendo que pagar más impuestos es un esfuerzo para todos, pero es necesario para afrontar la crisis que atraviesa el país. Sin embargo, para que este ajuste sea aceptable para los ciudadanos, debe venir acompañado de una reducción por parte del Estado del gasto corriente, una focalización de subsidios y la transparencia fiscal”, planteó la presidenta de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), Mónica Heller.
“El costo que tiene alcanzar la paz es muy alto y toma mucho tiempo. Para lograrlo se necesita del esfuerzo de todos. El IVA es un impuesto de fácil recaudación y baja evasión, lo que asegura su rápida recolección. Creemos que esta medida aportará recursos importantes para ayudar a combatir al terrorismo”, fue la postura de la Cámara de Industrias de Guayaquil (CIG), a través de un comunicado de prensa.
El ministro Vega viaja a Washington
La intención del Gobierno de incrementar el IVA al 15 % llega días antes del viaje del ministro de Economía y Finanzas, Juan Carlos Vega, a Washington DC (Estados Unidos) para reunirse con organismos multilaterales. El titular de la cartera de Estado ya no llegará con nada en las manos para presentarse ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En los mercados internacionales se espera que el Gobierno pueda acceder a financiamiento del organismo, que había reprochado la falta de implementación de ciertas medidas de ajuste, como subir el IVA o reducir los subsidios a los combustibles en el anterior acuerdo, que concluyó en el año 2022.
Fuente: Expresó
