Los cuerpos de rescate aceleran sus tareas entre los edificios colapsados. El primer ministro, Fumio Kishida, dijo que los organismos de seguridad están en una “carrera contra el tiempo”.
Las autoridades de Ishikawa confirmaron que ya son 48 las personas que murieron durante el poderoso terremoto que sacudió la región este 1 de enero, mientras los rescatistas corrían “contra el tiempo” para salvar a los sobrevivientes que permanecen bajo los escombros.
Un policía de la zona que fue epicentro del movimiento señaló también que hay 14 heridos de gravedad que están siendo atendidos.
“Se han confirmado daños muy cuantiosos, incluidas numerosas víctimas, edificios colapsados e incendios”, declaró a periodistas el primer ministro Fumio Kishida, citando una “carrera contra el tiempo” por rescatar a los afectados.
“Numerosas” personas sufrieron heridas menores en el temblor del lunes, indicó el gobierno de la prefectura. La mitad de las muertes ocurrieron en la ciudad de Wajima, donde un incendio arrasó varias casas.
El sismo de magnitud 7,5 sacudió Ishikawa, del lado del Mar de Japón, en la isla principal de Honshu, a las 16:10 (07: 10 GMT) del lunes, informó el Instituto Geofísico Americano (USGS).
Según las autoridades japonesas, la magnitud del temblor fue de 7,6. Después de más de 18 horas, la alarma de tsunamis fue desactivada durante la jornada de este martes.
La Agencia Meteorológica Japonesa (JMA) indicó que después del terremoto inicial se registraron 155 sismos adicionales que en su mayoría tuvieron magnitudes superiores a 3.
Las autoridades exhortaron a la población a refugiarse ante el riesgo de olas gigantes.
Olas de 1,2 metros de altura golpearon el puerto de Wajima, en la península de Noto, a las 16H21 (07H21 GMT), y otras más pequeñas se registraron en otros lados, incluido en la isla de Hokkaido, en el norte.
Pero la JMA anunció la mañana del martes el levantamiento de todas las alertas de tsunami.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ofreció por su parte en un comunicado “la asistencia que sea necesaria al pueblo japonés”.
“Situación horrible”
El ministro de Defensa, Minoru Kihara, informó que 1.000 militares están preparados para dirigirse a la región y que otros 8.500 fueron movilizados. Las autoridades usaron también 20 aviones militares para registrar los daños.
La autoridad de transporte cerró las autopistas en la zona cercana al epicentro y Japan Railways anunció que los trenes de alta velocidad entre Tokio y la prefectura de Ishikawa quedaron interrumpidos.
El gobierno, por otro lado, precisó que no se registraron consecuencias en las centrales nucleares del país.
En Ishikawa y las prefecturas vecinas de Toyama y Niigata unos 33.500 hogares quedaron privados de electricidad. Muchas casas se derrumbaron en la ciudad de Suzu, según los informes.
El portavoz del gobierno, Yoshimasa Hayashi, señaló “seis casos” de personas que estaban en edificios derrumbados en la zona de Ishikawa.
Imágenes en la televisión mostraron también un importante incendio que devastó varios edificios en Wajima.
En un video en la red social X se pudo ver a casas antiguas destruidas. “Es el distrito Matsunami de Noto. Estamos en una situación horrible. Por favor, ayúdenos. Mi ciudad está en una situación horrible”, lamentó una persona en la grabación.
“Hay un gran incendio. No podemos decir de inmediato cuántas casas están afectadas”, dijo a AFP un bombero de la localidad.
Algunas ciudades del extremo oriente ruso emitieron también alertas por posible riesgo de tsunami, aunque sin proceder a evacuaciones.
Las autoridades de Vladivostok, ciudad rusa de 600.000 habitantes, aconsejaron a los pescadores regresar a puerto.
El recuerdo de Fukushima
En total se registraron en la península de Noto más de 50 sismos de magnitud 3,2 o superior en un lapso de cuatro horas.
Situado en el denominado “cinturón de fuego” del Pacífico, Japón es uno de los países del mundo donde los sismos son más frecuentes.
El archipiélago aplica normas de construcción extremadamente estrictas, de modo que los edificios suelen ser capaces de resistir fuertes sismos, y los residentes están acostumbrados a este tipo de situaciones.
Pero persiste en el país el traumático recuerdo del terrible terremoto de magnitud 9,0 seguido de un gigantesco tsunami que en marzo de 2011 provocó una catástrofe que dejó unos 20.000 muertos o desaparecidos.
Esa catástrofe incluyó el accidente nuclear de Fukushima, el peor registrado en el mundo desde el de Chernóbil en 1986. El tsunami causó que se fundieran tres reactores de la central nuclear japonesa.