La historia de la creación del himno se remonta al año 1830.
El ensayista Juan León Mera recibió en 1865 la solicitud de escribir la letra del himno, esto tras los intentos fallidos de otros autores. En ese tiempo Mera se desempeñaba como secretario del Senado. La versión completa se publicó en un semanario de la época y hubo algunas críticas por la letra.
La historia de la creación del himno se remonta al año 1830, cuando al crearse la República, Juan José Flores _presidente del nuevo Estado_ encargó al poeta José Joaquín de Olmedo que escribiera una letra con tal propósito, detalla la Enciclopedia del Ecuador de Efrén Avilés Pino.
“Saludemos la aurora del día / para Quito la gloria inmortal, / en que osado Pichincha, el primero, / proclamó libertad, libertad.”, indicaba la primera estrofa de Olmedo, publicada en el año 1834.
Esta letra patriótica no recibió el favor del público, por lo que el propio Flores, en 1838 escribió una que en su primera estrofa dice: “Ceñidos de laureles / hagamos resonar/ independencia y leyes; / reposo y libertad; / y en la guerra y la paz / independencia o muerte. / O muerte! / olibertad!”
No obstante, la letra de Flores tampoco gustó a los ecuatorianos, y al igual que la anterior, no fue tomada en cuenta.
El asunto del Himno Nacional fue olvidado durante varios años, hasta que en 1865, Nicolás Espinoza Rivadeneira, presidente de la Cámara del Senado, solicitó a Mera la creación de una canción patriótica que sea digna de ser considerada como himno nacional del Ecuador.
“Mera aceptó de buen grado, y la historia relata que en la noche del 15 de noviembre de 1865, escribió la hermosa letra de nuestro Himno Nacional, la misma que, sometida al conocimiento del Congreso Nacional, tuvo aceptación y aprobación unánime”, indica Galo S. Román en su obra Ecuador: Nación Soberana.
Ese mismo año, el violinista argentino señor Juan José Allende -que servía en el ejército ecuatoriano-, presentó una partitura musical para el Himno Nacional, pero fue rechazada por el Congreso.
La letra fue enviada al francés Antonio Neumane, quien vivía en Guayaquil, para que finalmente se entregara al Congreso que aprobó la música. Tras desacuerdos aún en la letra, el 29 de septiembre de 1948, el Congreso Nacional declaró el himno como oficial e intangible la composición de Mera. (F)
Fuente: El Universo