Elon Musk anunció el retraso del segundo vuelo de prueba de Starship, programado para este viernes.
Esto se debió a que SpaceX debe substituir un actuador de aleta en la primera etapa, conocida como Super Heavy.
Dichas aletas son cruciales para dirigir el propulsor durante el regreso a Tierra.
La nueva fecha tentativa es el sábado a las 8 de la mañana, con una ventana de 20 minutos.
El objetivo es que Super Heavy americe en el Golfo de México luego de 7 minutos, mientras Starship orbite la Tierra y caiga cerca de Hawái 90 minutos después.
Es una prueba clave para esta nueva generación de cohetes de SpaceX, diseñados para llevar humanos a la Luna, Marte y más allá.
El retraso permite realizar el cambio de pieza para lograr con éxito esta histórica misión.
Fuente: Vandal
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