Al menos seis puntos tendría el acuerdo político al que llegaron el movimiento Revolución Ciudadana (RC), el Partido Social Cristiano (PSC) y la alianza gobiernista Acción Democrática Nacional (ADN) de cara a la sesión inaugural de la nueva Asamblea Nacional, que se realizará el próximo 17 de noviembre, según explicaron a EL UNIVERSO fuentes cercanas a la negociación.
El primer punto pasa por la elección del Consejo de Administración Legislativa (CAL). Henry Kronfle, de las filas del PSC, será elegido como presidente de la Asamblea Nacional; mientras que el correísmo se quedaría con la primera vicepresidencia, y ADN con la segunda. Las candidatas a ocupar esos cargos son, en principio, Viviana Veloz y Valentina Centeno, coordinadoras de esas bancadas.
Voceros del PSC señalaron que al momento hay 90 votos para la elección de Kronfle, pero que esperan llegar a 100 con el apoyo de sectores de minoría con los que hay algunos acercamientos.
Las cuatro vocalías del CAL se completarían con legisladores de RC, PSC y ADN, uno cada uno; y otro de Construye, aunque los socialcristianos podrían ceder su espacio si es que se conforman más bancadas.
En el segundo punto está la conformación de las comisiones. ADN se quedaría con la presidencia de las cuatro que ha solicitado el presidente electo Daniel Noboa Azín: la de Régimen Económico, la de Desarrollo Económico, la de Seguridad y la de Relaciones Internacionales.
En cuanto a la Comisión de Fiscalización, el correísmo había pedido la presidencia y los socialcristianos la vicepresidencia, pero esto todavía no se ha definido.
Los correístas insisten en que plantearán un juicio político a la fiscal general Diana Salazar, pero esto no es parte de las negociaciones que se han desarrollado en las últimas semanas.
El tercer punto tiene relación con la consulta popular que Noboa ofreció en campaña. Las fuerzas políticas apoyarán la iniciativa, pero también le enviará sus preguntas al mandatario para que las considere.
Noboa ha hablado de reformas constitucionales referidas, principalmente, a la seguridad, a la justicia y al esquema tributario. Pero no ha dado muchos detalles al respecto. Solo ha dicho que la enviaría en los primeros cien días de su mandato.
En cuanto a legislación, se han planteado tres problemáticas (punto cuatro, cinco y seis del acuerdo) alrededor de las cuales se trabajará en leyes y todos los elementos normativos que se necesiten para resolverlas: la inseguridad, la crisis energética y la reforma tributaria.
En principio, Noboa ha dicho que enviará proyectos de ley económico-urgentes cada mes.
Construye no ha participado en las reuniones políticas pues dice que no ha logrado acercarse a Noboa para dialogar, que los han “bloqueado”.
Pero sus voceros han expresado que, por la cantidad de asambleístas que tienen, les correspondería al menos un vocal en el CAL, que sería la legisladora Ana Galarza; y además tiene una pliego de leyes que quieren trabajar en lo que resta del periodo legislativo, especialmente relacionadas con seguridad e inteligencia, además de la conformación de la comisión ocasional que investigue el crimen de su líder y excandidato presidencial, Fernando Villavicencio.
Los delegados de las fuerzas políticas en las conversaciones han alegado que les interesa limpiar la imagen de la Asamblea Nacional para lo cual quieren tener una agenda clara, sin problemas ni chantajes.
Fuentes de la negociación advirtieron que este acuerdo es “legislativo, no de gobierno”; es decir que se implementará inicialmente solo para la designación de autoridades y comisiones de la Asamblea Nacional.
La Asamblea está conformada por 137 legisladores; de ellos, RC tiene 51; Construye tenía 26 pero tras conflictos internos quedaron 18, y el resto seguirá actuando bajo el membrete de Gente Buena; el PSC y sus aliados suman los 18; y el oficialista ADN tiene, al momento, 14 legisladores, pero Centeno adelantó que esta bancada podría llegar a 25 voluntades. (I)
Fuente: El Universo