Un cambio de condiciones en el contrato de venta de crudo Oriente de Petroecuador a la empresa Phillips 66 -que esta última ganó por licitación- genera polémica, pues se estaría afectando económicamente a la empresa pública transportadora Flopec en al menos $ 5 millones.
Pero además el premio conseguido posterior a la firma del contrato en esta operación, en la que se vendió 1′800.000 barriles y cuyos cargamentos ya salieron en octubre pasado, es menor a los conseguidos en otros concursos.
Aunque el contrato de adjudicación y en las bases del mismo se había acordado transportar el crudo por barcos Panamax y Aframax (los cuales maneja Flopec), se aceptó que se pudiera transportar a través de un barco Suezmax (aunque existía una restricción por parte de Flopec). Los Suezmax, por ser embarcaciones más grandes, representan un menor costo de transporte para la empresa que compra. Sin embargo, no se los usa porque la empresa estatal no dispone de estos.
Fuentes extraoficiales de las empresas indican que los fletes de esta operación, en las condiciones normales, habrían generado un pago de $ 13,8 millones para Flopec, pero el cambio de barcos le representó solo un pago de $ 8,2 millones. Esto es $ 5,6 millones menos de lo establecido. En cuanto al premio, con el cambio de barco se logró que la empresa entregara $ 0,05 más por barril, aunque los premios conseguidos entre el 4 de junio de 2021 y el 30 de enero de 2023 oscilan entre $ 1 y $ 2,50.
El actual gerente general de Petroecuador, Reinaldo Armijos, quien se mostró abierto a explicar todo el proceso como un acto de transparencia, reconoce el cambio de condiciones, pero niega que hubiese habido favoritismo para con la empresa privada y justifica los cambios ya que más bien se atendió el pedido de dicha empresa, por un evento fortuito. Explica que el problema que se generó en ese momento en el canal de Panamá fue que el flujo de barcos no es el mismo con suficiente nivel de agua. La cola que demora uno o dos días, por la baja del agua se extendió a 8 y 15 días dependiendo del tamaño del buque.
El manejo de esta operación comercial se conoce en momento en los que se realiza una nueva venta de crudo, esta vez por 11,2 millones de barriles, y que de acuerdo con anuncios previos del gerente Armijos tendría condiciones parecidas a las ventas a Phillips 66, que habría resultados favorables para el país.
La operación nace el 8 de septiembre cuando se realizó la convocatoria al concurso para la exportación de 1′800.000 barriles de crudo Oriente para octubre del 2023, que según sus bases debían ser entregados en cinco cargamentos de 360.000 barriles (+/- 5 %) cada uno. El transporte se debía hacer en barcos Panamax y Aframax (que son los que opera Flopec) por el terminal de Balao, aunque también se contemplaba la posibilidad de hacerlo por Punta Gorda, siempre con barcos Panamx y Aframax. El 22 de septiembre se realizó la apertura de sobres y resultó ganadora la empresa Phillips 66 Company. El precio ofertado fue un diferencial de -$ 2,64.
Sin embargo, el 28 de septiembre la empresa pidió que cambiaran las condiciones. Esto debido a un problema que no habían podido prevenir por el estiaje en el Canal de Panamá que generaba demoras en la entrega del crudo a sus clientes. La empresa pidió por escrito que “como gesto de tener una asociación sólida, le agradeceríamos que nos permitiera levantar una carga en un Suezmax y una carga en un Aframax, para este contrato”.
Desde la Gerencia de Petroecuador se le consulta a Flopec si puede entregar una autorización en este sentido, pese a conocer que existía la Resolución GGR 032 2023 en la que se limitaba la utilización de buques tipo Suezmax y que la adjudicación a la que se referían “no contemplaba esta opción”. En todo caso, ante el pedido de Petroecuador, Flopec accede a este cambio.
El 29 de septiembre, Petroecuador comunica a Phillips 66 que su solicitud ha sido aceptada, y se le indica: “adicionalmente, tomando en consideración la gestión efectuada por Petroecuador, por medio de presente agradeceré su apoyo para contar con un premio al diferencial ofertado, considerando la optimización financiera de su representada”. En respuesta, la empresa privada responde que “como compensación de este cambio ofrecemos $ 0,05 adicionales al precio ofrecido en nuestra licitación”. Esto significaría un poco más de $ 54.000 extras. Además, agradece a Petroecuador por la buena voluntad. De esta manera se cerró el trato.
Para Armijos, lo sucedido se debió al pedido de la empresa por temas fortuitos que suelen pasar tanto con las empresas que tratan con Petroecuador, como también a la propia Petroecuador cuando no puede cumplir con sus entregas por ejemplo por rotura de oleoductos. Para el gerente es más bien un tema de trato recíproco el permitir este tipo de cambios. Pero además dice que existe dentro del contrato una cláusula: la 2.19 que indica que “una vez adjudicado, los términos y condiciones pueden ser modificados, únicamente mediante acuerdo escrito entre las partes”.
Recalca que el pedido se evaluó técnicamente con Flopec, pues Petroecuador no toma las decisiones solo. Considera que en realidad Flopec no pierde pues cobra el 10 % de lo que renta. Sostiene que la buena sinergia con la que trabajan actualmente Petroecuador y Flopec ha permitido que haya mejores diferenciales.
Sobre el premio, comenta que en el tema comercial con que haya un aumento de uno, dos o tres centavos ya es una ganancia. En cambio, considera que si se hubiesen mantenido en una postura inicial, lo que se hubiese conseguido es generar un sentimiento en la empresa de que no somos recíprocos. “El tema comercial es algo delicado y nosotros debemos tener apertura, ver qué se puede solucionar”, dice.
En cambio asegura que para un nuevo proceso, que se abrió en octubre, y en el cual Phillips también ganó con un diferencial de -$ 1,09, la empresa ha pedido nuevamente que se haga a través de Punta Gorda y con barcos de mayor calado. Pero en esta ocasión no se puede hacer porque las condiciones no son las apropiadas. Petroecuador no tiene el producto necesario para abastecer, no existe ningún caso fortuito como lo del canal de Panamá y a Flopec se le complicaría en este momento aceptar un cambio de este tipo. (I)
Fuente: El Universo