La afición del Olympique de Marsella es experta en meterse en líos pero lo de este domingo ya ha sido la gota que ha colmado el vaso. En las horas previas al partido, los ultras decidieron apedrear el autocar del Olympique de Lyon y Fabio Grosso, el entrenador, recibió un impacto y bajó del mismo sangrando visiblemente del rostro.
En concreto, el autocar fue apedreado poco antes de su llegada al estadio Vélodrome después de haber sufrido varias ralentizaciones durante el trayecto. El alcance del ataque ha sido tal que la mitad de las ventanillas del lado derecho explotaron y Grosso resultó herido en el rostro por el impacto recibido, así como también el segundo entrenador Raffaele Longo, quien recibió el golpe en su ojo.
Según cuenta RMC Sports, Fabio Grosso se cortó con un vidrio tras reventarse la ventana después de que «se arrojaron dos adoquines contra dos lugares diferentes del autobús. Grosso y su segundo entrenador fueron golpeados en la cara, muy dañados y con cortes. Están en la enfermería del estadio».
El episodio, tal y como cuenta L’Equipe, ha dejado muy afectada a la plantilla y ahora mismo el partido evidentemente está en el aire y lo más lógico es que no se dispute, aunque todavía no hay reacción oficial. El duelo está previsto para las 20.45 horas de este domingo.
Parece, además, que no solo los futbolistas han recibido dichos ataques. Hasta tres autocares llenos de seguidores del Lyon habrían sido también apedreados y dejando como resultado varios heridos más.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO