Con un gol de Marcus Thuram en la segunda mitad que desatascó el choque y un tanto de Lautaro Martínez poco después, líder indiscutible del equipo, el Inter solventó el duelo ante el Torino (0-3), gracias también al postrero penal de Calhanoglu, y cedió la presión al Milan, obligado a ganar para recuperar el liderato que esta noche disfrutará el bando neroazzurro de Milán.
El Inter es el líder virtual de la Serie A gracias a la nueva dupla de oro interista, que permitió a los de Simone Inzaghi empezar a pensar con tranquilidad en el duelo frente al Salzburgo en UEFA Champions League de este martes. Y es que si la marcha de Romelu Lukaku fue un mazazo emocional y dejó dudas en la delantera, la llegada de Thuram las ha despejado todas en este inicio de campaña en la que a rendido a un nivel por encima del esperado y, más importante, se ha entendido con Lautaro Martínez.
Entre los dos, con sendas acciones claves en menos de 10 minutos, solventaron la complicada prueba a domicilio ante el ‘Toro’, que pese a no terminar de despegar puso en serios problemas al Inter, en especial en una primera mitad en la que obligaron a Sommer a aparecer más de lo esperado para mantener la puerta a cero en el primer acto.
Superados los primeros 45 minutos y con el toque de atención que sufrió en el primer tiempo, Inzaghi movió el banco y dio entrada a Dumfries y Carlos Augusto por los carriles para tener más presencia ofensiva. Y fue precisamente la entrada de Dumfries la que provocó la mejoría instantánea de un Inter mucho más incisivo que encontró rápido su recompensa.
Tres minutos en el campo y tras varias ocasiones generadas llegó la decisiva. Se internó en el área por el carril derecho el neerlandés y vio cómo Thuram, el lugar de meterse en el meollo con el resto de la zaga turinesa, se separó hacia el punto de penalti, habilitando una línea de pase que acabó abriendo el marcador de un partido cerrado.
Aprovechó el Inter el momento de zozobra del Torino, hundido, y cerró el partido en una acción a balón parado que remató el goleador del equipo, un Lautaro que firmó su gol número 11 del campeonato doméstico italiano, afianzándose en lo más alto de la tabla a cinco de su principal perseguidor, Victor Osimhen.
Ya en los compases finales, una contra de los visitantes liderada por Mkhitaryan acabó con el penal que transformó Calhanoglu en el añadido y que cerró el partido.
Reparto del trabajo en la nueva dupla de moda en Milán, un tanto para cada uno de los integrantes que reforzó al equipo tras el empate ante el Bologna y subió al Inter al liderato virtual de la Serie A a falta de lo que haga el Milan, obligado a ganar en su complejo duelo ante Juventus.
