A Lucero, constantemente sus fans le preguntaban cuándo volvería a la actuación, pues desde la telenovela “Por Ella Soy Eva” (2012) la cantante no había aceptado ningún papel en proyectos mexicanos. Su crédito más reciente fue en 2016, cuando apareció en “Carinha de Anjo”, en Brasil.
Desde niña, la intérprete de “Cuéntame” estaba acostumbrada a estelarizar proyectos, que van desde la novela infantil “Chispita” a cintas de amor juvenil, como “Fiebre de Amor” y “Coqueta”, pero en esta etapa de su vida no le llegaba ninguno que la enamorara de verdad… hasta que le ofrecieron el papel de “La Caponera”.
“Llegan las cosas cuando menos te lo esperas. Patricio Wills y Carlos Bardasano (productores) me dijeron: ‘Le va a todo lo que eres tú en este momento, con tu edad, tu madurez, lo que tú tienes, lo que eres, hasta con tu físico’. Y encima la música.
“A la música mexicana la amo desde hace muchos años, la defiendo, la llevo, la grabo, la canto en todos los países. Para mí, (la serie) es como si de pronto Lucero pudiera vivir en otra época, en los (años) 40, y tomar esta música desde el principio”, recordó la intérprete durante la filmación.
La protagonista de “Alborada”, de 54 años, se sabe muy diferente a Bernarda, la “Caponera”, pues al estudiar al personaje rulfiano descubrió las heridas que éste carga, en una historia protagonizada por personas que dependen casi por completo de su cambiante suerte.
Pero también conectó con ella por el vínculo que ambas tienen con el canto, pues al ir de feria en feria para ofrecer su actuación en palenques, Bernarda evita estar atada.
“Que ‘La Caponera’ sea libre a través de la música es una cosa preciosa, porque es como un simbolismo de que la música nos libera a todos. A mí, como Lucero, más porque toda mi vida me he dedicado a cantar. Bernarda no persigue la fama, la popularidad, saca dinerito en los palenques para comprarse su comida y vivir.
“Lo que a mí me identifica con ‘La Caponera’ es esta manera de liberarse sin perseguir nada más que expresar lo que traes adentro. El ‘soy famosa o no, le gusto a la gente o no’ a la ‘Caponera’ no le preocupa, trae otros temas, otras magias”, resaltó Lucero.
Detalló que pese a que la producción fue rigurosa con la investigación para recrear mucho del México rural que Rulfo plasmó, se tomaron licencias fuera de la época, pues querían temas de emblemas mexicanos, como José Alfredo Jiménez.
“La Caponera” ya ha cobrado vida en el cine con el trabajo de Blanca Guerra, en “El Imperio de la Fortuna” (1986), y Lucha Villa, en “El Gallo de Oro” (1964).
Lucero resaltó que en su versión el personaje crece aún más, debido a que los guionistas quisieron darle más protagonismo y desarrollo, porque si bien esta “Caponera” canta bien, la intención fue no perder la sordidez.
“El libro y las versiones mexicanas en cine son bastante duras, aquí no dejamos a un lado la rudeza, estamos reflejando esta esencia del cuento, de este México que sufre, con personajes muy solitarios, muy adoloridos en muchos momentos, pero es una adaptación única, porque no es la copia de lo que ya se hizo
“Lo fuerte y lo rudo está a través de la actuación, de los sentimientos, de las emociones, de la forma histriónica de entregar este personaje para que la gente lo pueda vivir y entender tantas cosas que luego no son fáciles de contar así, de pasadita, en una típica telenovela”, remarcó Lucero.
Fuente: Agencia Reforma
ra