Hasta el mes de septiembre de 2023, el déficit real del presupuesto del Estado fue de $3.115 millones, y las cuentas por pagar reales fueron de $2.054
millones. Sin embargo, al procesar la información de la página web del Ministerio de Economía y Finanzas, se obtiene un déficit de $2.643 millones (cuadro), y cuentas por pagar de $1.582 millones.
Juntos demostremos porque el déficit real es superior. La asignación anual en el presupuesto para pagar al IESS el 40 % de pensiones de los jubilados,
asciende a $2.355 millones (cuadro). Cada mes se debe registrar como obligación de gasto la doceava parte de tal cifra, esto es, $196,25 (2.355
dividido para 12). Debió registrarse como gasto lo devengado hasta septiembre, es decir, $196,25 por 9 = $1.766 millones. No obstante, hasta septiembre el gasto registrado por el 40 % de pensiones asciende a $1.636 millones (cuadro). Por lo expuesto, falta registrar como gasto $130 millones (1.766-1.636=130). Este hecho se confirma, cuando en el mes de septiembre se registra como gasto por tal concepto solo 5 dólares (cuadro). En consecuencia, el valor no pagado al IESS entre enero-septiembre suma $1.261 millones.
Realicemos un ejercicio similar en cuanto a los GADs. La asignación anual en 2023 para los GADs asciende a $3.325 millones (cuadro). Cada mes se debe registrar como obligación de gasto la doceava parte de tal cifra, esto es, $277,1 millones (3.325 dividido para 12). Entonces, debió registrarse como gasto lo devengado hasta septiembre, es decir, $227,1 por 9 = $2.494 millones. No
obstante, hasta septiembre el gasto registrado por transferencias obligatorias a los GADs fue de $2.152 millones (cuadro). Por tanto, falta registrar como gasto $342 millones (2.494-2.152=342).
Este hecho se confirma, cuando en el mes de septiembre se registra un dólar como gasto por transferencias a los GADs (cuadro). En consecuencia, el valor por pagar a los GADs hasta
septiembre suma $461 millones. Por todo lo expuesto, si al déficit de $2.643 millones, que resulta de procesar la información de la página web del Ministerio de Finanzas, agregamos el gasto no registrado del IESS por $130 millones, y el gasto no registrado de los GADS por $342 millones, el déficit real a septiembre alcanza $3.115 millones. De igual forma, si a las cuentas por pagar por $1.582 millones (cuadro), que resultan de procesar la misma información de la página web, agregamos el gasto no registrado por $130 millones del IESS, y el gasto no registrado de los GADs por $342 millones, obtenemos las cuentas por pagar reales de $2.054 millones a septiembre.
De otra parte, para financiar el déficit, las amortizaciones y otros pasivos, se obtuvieron préstamos (algunas cifras son hasta julio) de $569 millones del Banco Mundial, de la CAF $147 millones, del BID $523 millones, de JICA $172 millones, del BEI $100 millones, y el IESS compró bonos por $1.600 millones (compra neta de $1.162 millones, luego del pago de amortizaciones).
En el país de Manuelito, el IESS compra bonos por la citada cifra, a su vez, el Estado debe entre enero-septiembre $1.261 millones. Luego, el IESS a pesar de haber comprado bonos, reclama al Estado el pago de las deudas, porque el fondo de pensiones se muere de sed. ¡De locos!.
Nuestras disculpas por acudir a un artesanal escrutinio para develar la realidad del déficit, y evidenciar las penurias y veleidades entre dos carenciados. Un fisco con las arcas vacías y pobres saldos del Tesoro de $316 millones al 30 de septiembre, y un IESS con un fondo de pensiones en inanición. Dúo que evoca el más triste de los pasillos. Si el déficit a septiembre es $3.115 millones y cada mes el mismo es de unos $500 millones, además, en diciembre se debe pagar el décimo tercer sueldo, no es difícil colegir la magnitud del saldo rojo al término 2023.