El Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) tiene en planes la construcción del nuevo hospital de Especialidades Teodoro Maldonado Carbo. Así lo anunció el presidente del Consejo Directivo de esa entidad, Alfredo Ortega Maldonado, durante la sesión 53 de aniversario que se celebró este jueves.
Ortega expuso que este centro de salud contará con una moderna infraestructura, servicios especializados y tecnología de punta en beneficio de más de 3 millones de afiliados. La inversión en esta emblemática obra será de $ 489 millones y se estima que se entregue a finales del 2025.
En el evento de sesión solemne estuvo Ortega, además de Richard Gómez, vocal en representación de los asegurados; Diego Salgado, director general; Milena Charfuelan, subdirectora general; Roque Villacís, gerente general del hospital; entre otras autoridades nacionales y del sanatorio.
Esta nueva infraestructura será “una modera y funcional ciudadela hospitalaria” que incluirá un edificio de consulta externa de especialidades, área de emergencia, crítica, quirúrgica y hospitalaria, además de la ampliación de los servicios de diálisis.
Se prevé que el nuevo nosocomio sea pionero protonterapia, un tratamiento innovador para casos oncológicos, además que cuente con un nuevo acelerador lineal, braquiterapia, PET y gamma para diagnóstico de tumores, más puestos de quimioterapia para atención y cuidado de pacientes con cáncer y unidad de quemados.
En el acto solemne, el nuevo gerente destacó que el sanatorio ha sido testigo de hechos relevantes como la primera operación exitosa de corazón abierto, la incorporación de la cirugía robótica, entre otros eventos.
El presidente del Consejo Directivo sostuvo que esta unidad es insignia de la seguridad social y debe funcionar bien, sin actos de corrupción. Además, insistió en la necesidad de sumar esfuerzos para un manejo técnico y científico, sin intereses políticos “por personas que durante tantos años le hicieron daño”.
“Para llegar a este nuevo hospital hemos trabajado desde el primer día de funciones, no es una obra de última hora, sino totalmente planificada y ordenada. Este hospital es necesario, el que tenemos ha llegado a su fin”, enfatizó al exponer que el desarrollo de la urbe e incremento poblacional exige soluciones integrales y sostenibles, como esta reestructuración.
Entre los servicios, el nuevo hospital incrementará su capacidad operativa a 1.087 camas. En desglose pasaría de 579 a 702 camas en hospitalización; de 90 a 181 cubículos en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI); de 41 a 50 camas en Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales (UCIN); y, en recuperación de pacientes de 29 a 40 espacios.
Además, contará con un edificio de alojamiento para los familiares de los pacientes que provengan de zonas rurales o con largas estancias hospitalarias.
Se explicó que con la nueva infraestructura se resolverían problemas de circulación interna y mejor movilidad de pacientes y médicos, que a su vez han visto un aumento de demanda de intervenciones, puestos de atención de cuidados intensivos y hospitalizaciones.
La atención médica continuará mientras se realicen los trabajos de construcción de la nueva infraestructura hospitalaria, se indicó. (I)
