El primer ministro armenio Nazeli Baghdasarián informó este viernes 29 de septiembre, que unas 88.790 personas fueron desplazadas de manera “forzada” de Nagorno Karabaj a Armenia, lo que representa más del 73% de la población de ese enclave que fue atacado por Azerbaiyán la semana pasada, una operación que terminó con la rendición de las tropas de Nagorno Karabaj y el anunció de la disolución de la autoproclamada república de Artsaj.
Nagorno Karabaj era habitado por 120.000 personas de etnia armenia que, tras las operaciones azerbaiyanas realizadas el pasado 19 y 20 de septiembre para reintegrar el territorio separatista en su sistema administrativo y legal, decidieron abandonar ese enclave al rechazar cualquier forma de convivencia con los azeríes tras dos guerras por el control de Nagorno Karabaj en las últimas tres décadas.
Baghdasarián informó que se procesan 1.000 solicitudes por hora en los centros de coordinación humanitaria, puntos fronterizos donde los karabajíes están saliendo del territorio, pero señaló este viernes que el ritmo de las salidas ha disminuido en las últimas horas.
La UE pide respetar los derechos de los desplazados de Nagorno Karabaj
Esta situación ha llevado a las autoridades de Armenia a acusar a Azerbaiyán de “limpieza étnica”, una afirmación que Bakú niega.
La Unión Europea (UE) se pronunció y pidió este viernes a Azerbaiyán que garantice el derecho de los armenios de Nagorno Karabaj a volver a sus casas y a vivir con dignidad, sin intimidación ni discriminación.
“Azerbaiyán tiene la responsabilidad de garantizar los derechos y la seguridad de los armenios de Karabaj, incluido su derecho a vivir en sus casas con dignidad, sin intimidación y discriminación, así como el derecho a volver de los desplazados”, dijo un portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), en un comunicado.
Mientras tanto, Azerbaiyán respondió a los reclamos y denuncias al afirmar que respetará los derechos de los armenios étnicos que decidan quedarse, pero ratifica la disolución para siempre del concepto de “Estado separatista”.
Entre las instituciones que manifestaron su preocupación por la situación, está UNICEF, que este viernes también se pronunció y denunció que el 30 % de los huidos de Nagorno Karabaj son niños, muchos de ellos no acompañados.
“Les estamos brindando apoyo psicosocial y trabajamos para garantizar que puedan reunirse con su familia”, subrayó en rueda de prensa Regina De Dominicis, directora regional de UNICEF para Europa y Asia Central.
Según explicó Dominicis, la organización dispuso personal en Goris, ciudad armenia ubicada en la frontera, con el fin de ofrecer apoyo pediátrico y atender otras necesidades de estos niños. En tanto, confirmó que el Ministerio de Educación armenio se ha comprometido a integrar a los menores a las escuelas de Armenia, para que no interrumpan sus cursos escolares.
Azerbaiyán detuvo a funcionarios y militares armenios del enclave
En el marco de una operación para arrestar y juzgar a personas incluidas en una lista de figuras que Azerbaiyán considera que han cometido diversos delitos, este viernes se concretó la detención de un excomandante de las Fuerzas Armadas separatistas de Nagorno Karabaj en un puesto de control fronterizo con Armenia.
Se trata del comandante Levon Mnatsakanyan, quién dirigió el Ejército de la autoproclamada República de Artsaj de 2015 a 2018.
Los funcionarios azerbaiyanos señalaron que hay “un par de cientos” de nombres en una lista de personas por detener, según informó la agencia de noticias estatal rusa TASS, y reprodujo Reuters.
El servicio de seguridad estatal de Azerbaiyán informó que había arrestado a otro excomandante militar, Davit Manukyan, que solía ser el primer subcomandante de las fuerzas armenias de Karabaj. El hombre era buscado por Azerbaiyán por “crímenes terroristas”.
El miércoles 27 de septiembre, Ruben Vardanyan, exjefe del gobierno separatista de etnia armenia en Karabaj, fue detenido mientras intentaba cruzar a Armenia y fue acusado de financiar el terrorismo y de cruzar ilegalmente la frontera con Azerbaiyán el año pasado.
Sobre las detenciones, desde Bakú, capital de Azerbaiyán, no han brindado mayores detalles.
Nagorno Karabaj espera la visita de referentes de la ONU
Tras las denuncias e insistencias de países occidentales, Bakú aceptó recibir una misión de la ONU en los próximos días que, según informaron desde la organización, buscará evaluar la situación en el territorio en conflicto y su impacto en la vida de los residentes, sin confirmar aún una fecha.
“Es esencial que una misión de la ONU pueda acceder al territorio en los próximos días”, aseguró un portavoz de la Unión Europea, citado por agencias de noticias.
Desde occidente, pidieron a Bakú que cumpla sus promesas de proteger a los civiles.
Fuente: France 24
