El gobernador Gavin Newson busca frenar la ola de violencia causada por el uso de armamento y aseguró que las masacres no pueden ser toleradas.
El gobernador de California, Gavin Newsom, duplicará los impuestos sobre armas y municiones para invertir el dinero en mejorar la seguridad en las escuelas públicas y prevenir hechos violentos, en lo que consideró como un “pequeño precio a pagar”.
Se trata de una nueva ley que fue promulgada el martes y que modifica la tasa actual impuesta por el gobierno federal, la cual es de 10% u 11% según el tipo de arma que se compre. Ahora, California se convierte en el único estado que tiene su propio sistema de impuestos sobre armamento, el cual añade otro 11% al valor.
Newsom es conocido por su reputación de gobernador liberal y ser de quienes mantenía una política de rechazar la elevación de impuestos, pero esta vez decidió impulsar la medida, pues abiertamente apoya las restricciones sobre las armas a nivel estatal y nacional.
El posible candidato a la presidencia por el Partido Demócrata, argumentó que esta nueva ley de impuestos era distinta a otros incrementos, pues la violencia afecta a los contribuyentes, tanto en la salud y seguridad como en el sistema de justicia penal.
“Creo que esta es una inversión muy modesta para prevenir y reducir esos costos en última instancia. Las masacres son demasiadas, no podemos normalizarlas ni aceptarlas. Este es un pequeño precio que pagar.”, declaró Newsom.
Otras medidas contra las armas
Gavin Newsom también firmó una ley que modifica las reglas estatales sobre armas ocultas. Ahora, California prohíbe que los ciudadanos puedan portar armas en lugares públicos como parques, iglesias, bancos, centros donde se venda alcohol y en reuniones sociales.
Además, se oficializó otra norma que, a partir del 1 de julio de 2028, favorecerá el rastreo de armas y sus propietarios. La ley establece que toda pistola semiautomática vendida en California deberá contar con tecnología de micro estampado.
