La Asociación Ecuatoriana de Plásticos (ASEPLAS), presentó ante la Corte Constitucional del Ecuador, un escrito AmicusCuriae con relación a la resolución que debe tomar el organismo sobre el Decreto Ley de Urgencia Económica para restablecer el Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas No Retornables, que el presidente de la República, Guillermo Lasso envió el pasado 18 de agosto del 2023.
El tributo fue creado en el año 2012 a través de la Ley de Fomento Ambiental y Optimización de los Ingresos del Estado. En enero del 2022, la Corte Constitucional declaró la inconstitucionalidad por la forma de la mencionada ley al existir falta de unidad de materia; sin embargo, la Corte con el objeto de evitar un vacío normativo o consecuencias en contra de la suficiencia recaudatoria, difirió los efectos de la sentencia hasta el 31 de diciembre de 2023, a fin de que el Ejecutivo, promueva en ese tiempo las reformas legislativas necesarias.
La finalidad del Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas No Retornables (IRBP) es incidir positivamente en los patrones de comportamiento en la producción de utilizar elementos contaminantes como recursos reutilizables, además de servir como fuente de ingreso para miles de familias ecuatorianas que se dedican de manera informal al reciclaje. La interrupción de este impuesto podría desalentar la práctica de reciclaje de botellas de plástico PET durante el período en que no esté vigente, lo que resultaría en graves problemas de contaminación ambiental y afectaría directamente los ingresos de las personas involucradas en la industria del reciclaje en diversos niveles.
La tarifa impositiva es de dos centavos de dólar estadounidense (USD 0,02) para los fabricantes e importadores de bebidas en envases de plástico. Según el Censo Nacional a Recicladores Base, existen cerca de 9.744 personas catalogadas como recicladores base, quienes aproximadamente recolectan un total de 28.083 unidades al mes, que les da un valor de recaudación de USD 561,66 como ingreso mensual. La supresión de este impuesto podría tener un impacto negativo en los ingresos de las familias involucradas en la actividad de reciclaje, lo que generaría un efecto multiplicador adverso, especialmente en el ámbito de la economía popular y solidaria.
De acuerdo a la información recogida por el SRI desde el año 2016 hasta el año 2022, por concepto del IRBP, el Estado recaudó un valor de USD 277.895.494,89, el que ha sido devuelto (en gran parte) a las personas que realizan las labores de recolección de botellas plásticas utilizadas dentro de la cadena de recolección.
Desde la introducción del Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas no Retornables, la industria del plástico ha reconfigurado su cadena de valor hacia la economía circular, generando acciones colaborativas constituyéndose como un clúster involucrado positivamente en más procesos de reciclaje, al permitir que estas botellas plásticas recogidas se utilicen como materia prima para la fabricación de nuevos productos reciclados, incorporando este estímulo en su modelo de negocios, lo que les motiva a innovar en sus procesos. Además, esta medida crea una conexión con el sector social del país, ya que implica la colaboración con los recicladores de base para el suministro de material reciclado.
La posición de ASEPLAS es alcanzar que la Corte Constitucional emita un dictamen favorable de constitucionalidad del Decreto-Ley de Urgencia Económica para la Creación del Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas No Retornables.
El Ing. Jorge Mórtola, Presidente de ASEPLAS, indicó que “en el caso de que la Corte Constitucional no apruebe el Decreto Ley enviado por el Presidente de la República, a más de provocar una tragedia para los más de 30.000 recicladores que se dedican a esta actividad, puede producir un serio precedente para seguridad jurídica de las empresas que ha invertido más de 60 millones de dólares en los últimos 12 años para efectos de procesar los residuos plásticos recolectados del medio ambiente”, finalizó.
La Asociación Ecuatoriana de Plásticos (ASEPLAS) celebra su 45º aniversario de fundación en este año 2023. Representa a más del 90% de la industria del plástico y el reciclaje en Ecuador. La organización lidera numerosas iniciativas relacionadas con la economía circular y promueve la responsabilidad sostenible en la cadena productiva, demostrando su firme compromiso con el desarrollo positivo del país.
