El jueves, el mandatario le dio el ‘bastón de mando’ a la dirigente que aspirará a la presidencia, en 2024, por el partido oficialista.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció este viernes que ya cerró su etapa como líder del movimiento que en 2018 lo llevó a ganar las elecciones y que ahora continuará bajo el mando de la candidata presidencial Claudia Sheinbaum.
“Ya terminé mi ciclo como dirigente del movimiento de transformación, ahora la dirección del movimiento está en manos de Claudia“, afirmó el mandatario durante su habitual conferencia de prensa.
El presidente fue cuestionado sobre la incertidumbre que ha generado el excanciller Marcelo Ebrard, el principal rival de Sheinbaum y quien a último momento se retiró de la contienda interna con denuncias de múltiples irregularidades.
El lunes, Ebrard anunciará si deja o no al oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y si se postula a presidente bajo las siglas del partido Movimiento Ciudadano.
“Lo de Marcelo ya lo expliqué: es una gente buena, en sentido amplio. Es un hombre muy preparado, tiene mucha experiencia política y es mi amigo. Está en completa libertad“, dijo López Obrador.
Libertad
También consideró que hay que acostumbrarse a que la democracia es pluralidad, no pensamiento único, y por eso se debe garantizar siempre el derecho a disentir.
“La libertad no se implora, la libertad se conquista. Ojalá todos los dirigentes fuesen rebeldes”, dijo, aunque aclaró que lo más importante es confiar en los sentimientos y en la opinión del pueblo.
De esta manera hizo referencia a la validez de las cinco encuestas que se realizaron a nivel nacional y en las que la mayoría de las personas consultadas optó por Sheinbaum como candidata presidencial, resultado que Ebrard rechaza.
Por otra parte, López Obrador advirtió que no puede darle a su excanciller ningún consejo sobre su futuro político.
“Él ya sabe, ¿yo qué voy a recomendarle, si es un hombre con mucha experiencia? Sólo decirle que, como lo expresó Claudia Sheinbaum, están las puertas abiertas pero, al mismo tiempo, que tome sus decisiones”, dijo al reiterar que considera a Ebrard como su hermano.
“Vamos a esperar. Si tiene una reunión Marcelo con su equipo es porque seguramente los va a consultar. Y, si al final deciden ‘vámonos’ o ‘tenemos esta otra posibilidad’, ‘nos están ofreciendo esto’, pues son libres”, insistió.
¿Ruptura?
El mandatario se refirió a las críticas de Ebrard, quien denunció que ya no tiene más espacio en Morena debido a las supuestas irregularidades que rodearon la elección de Sheinbaum.
“Si hubiésemos actuado de manera antidemocrática, si hubiese habido dedazo, trampas, entonces yo me sentiría muy mal. Pero no: tengo mi conciencia tranquila“, expresó el presidente al revelar que él mismo incorporó en las reglas del proceso interno las exigencias que planteó Ebrard.
Por ejemplo, dijo, se aceptó la propuesta del excanciller de que todos los precandidatos renunciaran a los cargos que ocupaban, algo que Sheinbaum rechazaba porque quería seguir siendo jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
“Ya no es una cuestión de pleito, es que cada quien decida. Yo sí creo que la mayoría de la gente quiere que continúe la transformación, y también creo que Claudia es muy buena dirigente”, dijo al reiterar que se siente contento y tranquilo porque no cree que el conservadurismo tenga posibilidades de volver al poder en las elecciones de 2024.
Fuente: RT
