Debido a que la moción para que sea recibido en el pleno de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) el presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), Wilman Terán, solo recibió el voto a favor de once jueces, de doce necesarios, en el pleno del organismo no se aprobó la iniciativa para escuchar al titular del órgano de gobierno, administración, vigilancia y disciplina de la Función Judicial.
El 29 de agosto pasado, el presidente de la Judicatura habría enviado a la Corte Nacional un pedido formal para que los magistrados en pleno lo reciban y escuchen. La solicitud fue hecha un día después de que el pleno de la Corte Nacional de Justicia decidió retirar la confianza a Wilman Terán, quien es el representante de la CNJ y a la vez preside el Consejo de la Judicatura.
La decisión de no dar paso a la moción de recibir a Terán fue tomada en una sesión del pleno dada la mañana de este miércoles, 6 de septiembre. Un total de 18 magistrados estuvo presente en el momento de votar respecto a si recibía al presidente de la Judicatura. Siete magistrados, incluido el presidente de la CNJ, Iván Saquicela, votaron en contra de la moción hecha por la jueza Enma Tapia y respaldada por Alejandro Arteaga. Varios jueces de la Sala Penal decidieron retirarse de la sala para este punto.
En el artículo 179 del Código Orgánico de la Función Judicial se señala, con respecto a la conformación y el quorum en el pleno de la Corte Nacional de Justicia, que este se integrará con sus 21 juezas y jueces. El quorum para la instalación y funcionamiento será de por lo menos doce de sus miembros, mientras que el quorum para la toma de decisiones igualmente será de por lo menos doce votos conformes.
De no alcanzarse esta votación, se aclara en la misma norma, se tomará una nueva en la siguiente sesión. Si en esta segunda oportunidad tampoco se alcanzan por lo menos los doce votos, la propuesta se considerará denegada.
Durante la sesión ordinaria se debatió mucho respecto a si se debía o no recibir al presidente del CJ, principalmente porque lo que pueda decir el funcionario podría afectar la independencia de los jueces respecto a causas que están abiertas. Unos pensaban que debían recibir a Terán, pero antes él debía señalar los puntos que trataría en su exposición; otros creían que no debía ser recibido, sino que más bien solo envíe una carta con los puntos que quiere tratar Terán y que la misiva sea leída en el pleno; otros más planteaban que sea recibido el titular de la Judicatura en el pleno de la Corte Nacional y que, en el momento en que se refiera a algo que ponga en riesgo el rol jurisdiccional y la independencia de los jueces y el pleno, se lo pare en su exposición.
Saquicela fue partidario de que se den a conocer antes los temas que pretende abordar el presidente Terán, para así tomar una decisión al respecto. El titular de la CNJ cree que el pedido hecho por Terán es muy amplio, pues señala la carta: “Con la finalidad de que la más alta magistratura tenga conocimiento de las actuaciones que hemos generado fieles al mandato ciudadano de fortalecer el sistema judicial…”.
“Esto se da a propósito de un comunicado del pleno de la CNJ, que fue un criterio sino unánime, fue absolutamente consensuado. Entonces, obviamente tenemos que saber qué es lo que va a expresar para poder escuchar. Creería que esa puede ser, en principio, una salida”, refirió Saquicela.
La mayoría de los 21 jueces que integran el pleno de la CNJ tomó, la tarde del lunes 28 de agosto pasado, la decisión de no solo retirar la confianza a Terán, quien fue propuesto por el pleno de ese organismo para que integre la terna de donde saldría el nuevo titular del CJ, sino también de exhortar a los vocales actuales de la Judicatura a dar “un paso al costado” en salvaguarda de la institucionalidad de la Función Judicial y la seguridad jurídica del país.
Saquicela en su momento aclaró que en este caso no se trata solo de Wilman Terán, sino que es el CJ el que está provocando inseguridad jurídica, inseguridad en la tutela de derechos y realizando, incluso, actos bochornosos. El principal de la Corte Nacional recordó que ya han existido desde este CJ actos irregulares para intentar destituir a la fiscal general, Diana Salazar, dentro de la destitución adoptada con solo dos votos, el 19 de agosto pasado, contra el juez nacional Walter Macías, e indicó que es una institución que mantiene a dos vocales (Juan José Morillo y Maribel Barreno) que son investigados y procesados penalmente por el delito de tráfico de influencias.
“No puede un CJ en estas condiciones ser el órgano de gobierno del Poder Judicial. Hoy más que nunca los ciudadanos no solo exigen, sino que hay un clamor, de que la justicia sea diferente y un órgano como el CJ que respete el ordenamiento jurídico. A todas luces se ha hecho todo lo contrario”, acotó. (I)
Fuente: El Universo