Durante su visita por localidades de la provincia de Imbabura el viernes 1 de septiembre, la candidata presidencial Luisa González, de la Revolución Ciudadana (lista 5), apareció portando un chaleco antibalas y explicó que lo hace por las últimas noticias de amenazas contra su vida.
“Les tengo que dar una triste noticia: estoy usando chaleco antibalas”, dijo González a operadores turísticos de Otavalo con quienes se reunió al pie del lago San Pablo. Explicó que lo hace ya que en la Fiscalía General del Estado existe un proceso abierto contra un ciudadano que habría asegurado poseer bombas para atentar contra su vida.
González agregó que la presunta alerta “no es contra una candidata; es contra la democracia”.
“No puede ser que tenga que usar un chaleco antibalas mientras cada madre, cada padre de familia no tiene acceso a seguridad. No hay garantías para hacer política en este país ni para vivir en paz. Esto tiene que terminar”, apuntó en una publicación en sus redes sociales.
Además del chaleco antibalas, la candidata del correísmo informó que aceptó la protección de las Fuerzas Armadas.
“Hoy recibí amenazas contra mi vida al ser la candidata más opcionada para ganar la Presidencia”, acotó.
La presidenciable, que pasó en primer lugar a la segunda vuelta, contó que no quería usar chaleco antibalas porque considera que la seguridad debe ser para todos los ecuatorianos.
Desde ahora, su agenda de actividades las cumplirá bajo estrictas medidas de seguridad y con presencia de elementos de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas.
González se enfrentará en las urnas con Daniel Noboa, la opción de la Alianza Democrática Nacional (ADN), el próximo 15 de octubre. El pasado 20 de agosto, en las elecciones generales anticipadas producto de la muerte cruzada que el presidente Guillermo Lasso decretó el 17 de mayo pasado, logró 3′315.663 votos, mientras que Noboa reunió 2′315.296 votos, equivalentes al 23,47 % del total. (I)
Fuente: El Universo