Un grupo internacional de astrónomos identificó, mediante el telescopio espacial James Webb, una extraña galaxia que dejó de formar nuevas estrellas hace 13.000 millones de años, lo que la convierte en la galaxia ‘muerta’ más antigua jamás vista, informó este miércoles la Universidad de Cambridge (Reino Unido).
Se trata de la galaxia JADES-GS+53.15508-27.80178, que fue descubierta en el 2010. De acuerdo con la revista New Scientist, en ese momento los científicos no lograron determinar en detalle las características de la nueva galaxia. En un nuevo estudio, recientemente publicado en el servicio de preimpresión arXiv, se reportó que la JADES-GS+53.15508-27.80178 parece que vivió fugazmente, puesto que se observó que su formación estelar ocurrió rápidamente y se detuvo casi con la misma rapidez.
Los científicos comentaron que anteriormente habían encontrado galaxias muertas en el universo temprano. Sin embargo, mencionaron que la JADES-GS+53.15508-27.80178 es sorprendente, debido a que esta estructura astronómica se encuentra tan lejos que se puede apreciar tal como se veía 700 millones de años después del Big Bang.
“Hay mucho gas en el universo primitivo, y el gas alimenta la formación de estrellas”, señaló Francesco D’ Eugenio, quien recalcó que visualizar “una galaxia muerta en una época tan temprana significa que debe haber algo que impida activamente” que se generen nuevos cuerpos estelares.
Tras analizar los datos del proyecto JADES, los especialistas estimaron que la actividad de formación estelar de la galaxia tuvo una duración de entre 30 y 90 millones de años. No obstante, mencionaron que la generación de estrellas cesó abruptamente entre 10 y 20 millones de años antes de que esta fuera detectada por el James Webb.
Explicando el posible origen de la muerte de la galaxia
Los expertos desconocen qué ocasionó que la galaxia dejara de generar nuevas estrellas, además de que aún no está claro si el estado de “apagado” es temporal o permanente. En un intento por explicar los factores que provocaron esta situación, se propusieron dos hipótesis.
La primera indica que la turbulencia creada por las enormes cantidades de radiación y los poderosos vientos que tienen lugar cuando se forman las estrellas pudieron haber expulsado el gas de la galaxia. Esto eventualmente detuvo la aparición de nuevos cuerpos estelares. La otra posible solución es que un agujero negro en el centro de la JADES-GS+53.15508-27.80178 pudo haber eliminado este gas.
Increíblemente, en el supuesto de que ambos procesos hubieran ocurrido, estos tuvieron que desarrollarse más rápido en el universo temprano que en la actualidad. Por último, los investigadores declararon que se darán a la tarea de buscar más galaxias similares con el propósito determinar su prematura muerte. RT
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