La Policía de la India está investigando a una profesora después de que un video suyo animando a los alumnos a abofetear a su compañero, de 7 años, quien es musulmán, desatara una indignación generalizada en el país.
El video del incidente, que tuvo lugar en el distrito de Muzaffarnagar, en el norte del estado de Uttar Pradesh, muestra al niño de pie, asustado, frente a sus compañeros de clase, mientras la profesora pide a los alumnos que le peguen.
El niño llora mientras sus compañeros se turnan para abofetearle, mientras se oye a la profesora decir a los alumnos que lo hagan “correctamente”. Se oye a un hombre reírse mientras el niño llora y continúan las bofetadas.
El superintendente de Policía de Muzaffarnagar, Satyanarayan Prajapat, dijo este viernes que la profesora dijo a los alumnos que pegaran al niño “por no recordar las tablas de multiplicar”.
La profesora también hizo referencia a la religión del chico, según Prajapat.
“La profesora declaró: ‘Cuando las madres de los alumnos mahometanos [los que siguen el islam] no prestan atención a los estudios de sus hijos, su rendimiento se arruina”, dijo.
La Policía del distrito abrió un expediente contra la profesora y se está llevando a cabo una investigación. Aún no se acusa formalmente a la maestra. Los funcionarios del distrito también ordenaron el cierre de la escuela, según CNN News-18, afiliada a CNN.
CNN se puso en contacto con la Policía de Uttar Pradesh para obtener más información.
El incidente ha causado indignación y malestar generalizados en la India, la mayor democracia del mundo, con 1.400 millones de habitantes, donde las políticas nacionalistas hindúes del partido gobernante, el Bharatiya Janata Party (BJP), han agravado las tensiones comunales del país y han creado una atmósfera de miedo y alienación entre los grupos minoritarios, según grupos de defensa de los derechos humanos y críticos con el Gobierno.
El destacado político de la oposición Rahul Gandhi acusó a la profesora de “sembrar el veneno de la discriminación en la mente de niños inocentes”. Escribiendo en Twitter, ahora conocido como X, dijo: “Convertir un lugar sagrado como la escuela en un mercado del odio: no hay nada peor que esto que un profesor pueda hacer por el país”.
Gandhi también culpó al BJP de avivar la intolerancia religiosa.
“Este es el mismo queroseno esparcido por el BJP que ha incendiado todos los rincones de la India”, escribió Gandhi. “Los niños son el futuro de la India: no los odien, todos juntos tenemos que enseñar a amar”.
Aunque el BJP no ha respondido a los comentarios de Gandhi, afirma desde hace tiempo que no discrimina a las minorías y que “trata a todos sus ciudadanos con igualdad”. Durante un viaje a Estados Unidos en junio, el primer ministro del país, Narendra Modi, dijo a periodistas que en la India no había “absolutamente ningún espacio” para la discriminación.
La legislación india no contiene una definición estatutaria del castigo corporal dirigido a los niños, pero el castigo físico y el acoso mental están prohibidos en virtud de la Ley sobre el Derecho de los Niños a la Educación Gratuita y Obligatoria del país.
Según CNN News-18, la profesora alegó que el padre del niño de 7 años le había pedido que lo castigara, y añadió que ella no podía hacerlo porque tiene una discapacidad, por lo que había dicho a los demás alumnos que lo disciplinaran.
“Su padre trajo al niño y dijo que lo enderezara. Como yo no puedo levantarme, se me ocurrió pedir a uno o dos niños que le pegaran”, explicó.
El incidente se produce en un momento de crecientes tensiones comunales en el país, a medida que las políticas populares, pero divisivas, del BJP ganan impulso en India.
Un estudio del economista Deepankar Basu constató un aumento del 786 % en los delitos de odio contra todas las minorías entre 2014 y 2018, tras la victoria electoral del BJP.
Uttar Pradesh, donde se produjo el incidente, es el mayor estado de la India, con unos 200 millones de habitantes. Cuenta con una población religiosamente diversa, en la que alrededor del 20 % de sus residentes son musulmanes.
Sin embargo, sigue siendo uno de los estados más polarizados de la India.
Su ministro principal, el monje hindú convertido en político del BJP Yogi Adityanath, ha sido criticado por su retórica antimusulmana y sus políticas que dan prioridad al hinduismo, y el estado ha aprobado leyes que, según los críticos, tienen sus raíces en el “hindutva”, la base ideológica del nacionalismo hindú.
Fuente: CNN