Han pasado cuatro días, pero el Caso Vinicius Jr. nunca paró de crecer en España tras los insultos racistas que recibió durante la derrota ante Valencia en Mestalla. Los agravios quedaron documentados en el informe elaborado por el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que le anuló su expulsión sobre el final del duelo y tenía vía libre para ser titular este miércoles en el Estadio Santiago Bernabeu. Una molestia física lo dejó afuera de la convocatoria, pero no imposibilitó que fuera el centro de atención ante Rayo Vallecano por las visibles muestras de apoyo dentro de la cancha como en las tribunas.
Muchos fanáticos se congregaron desde temprano en el reducto con capacidad para más de 81 mil espectadores con banderas en apoyo al delantero sudamericano por el calvario que padecióo en el duelo de la fecha 35 del certamen, que ya tiene como campeón al Barcelona. “Vini es mi comunión, verte es mi regalo”, era una de las frases que lucían en una cartulina sostenida por una niña, mientras el lugar comenzaba a llenarse con el correr de los minutos.
El ingreso de los equipos al césped atravesó un momento singular cuando todos los futbolistas de la Casa Blanca procedieron a demorar el sorteo entre los capitanes, que debía realizarse entre Karim Benzema y Santiago Comesaña, para ponerse de espaldas y lucir una camiseta unificada con el número 20, en alusión al dorsal que utiliza una de las figuras del plantel en cada encuentro. Vini bajó al campo para agradecer a sus compañeros, pero también a los fanáticos, ya que desde el Fondo Sur desplegaron una bandera con la frase: “Vinicius somos todos, basta ya”.
Vía infobae