En 90 minutos a pura intensidad, Manchester City dio el golpe en el Emirates Stadium y le ganó al Arsenal para alcanzarlo en lo más alto de la Premier League: lo venció 3-1 por el partido postergado de la 12° fecha y consiguió tres puntos claves para compartir el liderazgo.
Tal como se preveía, se jugaron todo en Londres y brindaron un gran espectáculo dentro del campo de juego. Sin embargo, la visita sacó provecho de los errores en defensa de los Gunners para quedarse con un triunfo clave para mantener la pelea por el título al rojo vivo. Pese a que la primera fue para el local, por medio de un cabezazo de Eddie Nketiah luego de un centro de Oleksandr Zinchenko desde la izquierda que salió cerca del palo izquierdo, en su primera situación de riesgo, los dirigidos por Pep Guardiola encontraron la llave del gol.
Precisamente, un pase atrás de Takehiro Tomiyasu derivó en un anticipo de Kevin De Bruyne, que no perdonó y definió sin controlar el balón por encima de la humanidad de Aaron Ramsdale para romper la paridad en el marcador. Desde allí, el local tuvo que salir a buscarlo. El mismo Tomiyasu lo tuvo mediante una volea de zurda que salió por encima del travesaño, pero poco después llegó la posibilidad de igualar la historia. Nketiah fue derribado dentro del área por Ederson, pese a que Nathan Aké había salvado su tanto, y el árbitro cobró penal.
Bukayo Saka se encargó del remate y lo cambió por gol mediante un disparo abierto de zurda a la derecha del arquero, que eligió el palo contrario. Y pese a la euforia, los Citizens lo tuvieron por duplicado para despedirse con la victoria parcial en el final de la primera etapa. Primero Ilkay Gündogan exigió una gran atajada de Ramsdale con un tiro a quemarropas de derecha, y luego, tras un centro desde la izquierda, Rodri ganó de cabeza, el balón se desvió en Aké, picó y se estrelló en el travesaño, lo que le permitió respirar al equipo de Mikel Arteta.
Sin embargo, para el complemento el City se mostró mejor. Había tenido el gol en los pies de Erling Haaland, pero fue anulado por posición adelantada, aunque más tarde tuvo revancha. Justamente, el segundo se gestó en sus pies después de una mala salida de Gabriel Magalhaes. Bernardo Silva jugó para Haaland, que se frenó antes de ingresar al área y abrió a su izquierda, Gündogan dejó pasar entre sus piernas y apareció en soledad Jack Grealish por el segundo palo para definir de derecha y vencer a Ramsdale, luego de un desvío en un pie de Tomiyasu.
Poco después, Gündogan cedió para De Bruyne por derecha, el belga jugó atrás y Haaland controló de zurda para luego rematar cruzado de derecha para dejar sin posibilidades a Ramsdale en el arco y sentenciar el resultado final que los pone en lo más alto. Los de Arteta intentaron reaccionar sobre el final con un nuevo cabezazo de Nketiah que salió junto al palo derecho y un posterior disparo del ingresado Leandro Trossard que se fue apenas por encima del travesaño ante la atenta mirada de Ederson, pero no llegó al descuento.
Arsenal se quedó con las manos vacías y le dieron la chance a Manchester City de igualarlo en la tabla, aunque por diferencia de gol lo relegó al segundo lugar con un partido más. El sábado, los Gunners visitarán a Aston Villa mientras que el City hará lo propio ante Nottingham Forest. (D)